Quinta derrota del Fabril en las seis últimas jornadas de liga. El filial del Deportivo está inmerso en su primera crisis de resultados de la temporada que se confirmó con el 4-1 en Pasarón ante un Pontevedra que despide el año 2023 en el primer puesto. Por su parte, el Depor B cae por primera vez en lo que va de curso a la posición de ‘playout’.

Y eso que el encuentro de Pasarón empezó realmente bien para el conjunto que dirige Óscar Gilsanz. En un ataque rápido en el que el Pontevedra no estaba bien posicionado en su área, una incorporación de Iano Simao por banda izquierda terminó con una asistencia para que Nájera, con poco ángulo, superase a Edu Sousa anotando el 0-1.

El tanto del empate del Pontevedra llegó, de nuevo, por permisividad de la defensa dentro del área; en este caso la del Fabril. Chiqui controló en el segundo palo y encontró, totalmente solo en el borde del área pequeña, a un Álex González que sólo tuvo que poner el interior de su bota izquierda para mandar el cuero al fondo de las mallas de un indefenso Hugo Ríos.

Sólo tres minutos después de que el conjunto de Yago Iglesias anotase el gol del empate, llegaría el que completaría la remontada. La acción se desarrolló por la banda derecha con la incorporación del lateral Bastos, que trató de meter un pase raso hacia Dalisson. Barba metió el pie para desviar la entrega con tal mala suerte que dejó totalmente solo a Rufo en el área. El punta granate cruzado con un tiro raso en el 2-1.

La segunda mitad empezó con una buena ocasión para el Pontevedra con centro de Yelko y remate de cabeza de Bastos que no encontró portería por poco. 

Mati Castillo tuvo el empate en un remate tras cazar el segundo balón en una falta lateral colgada por Jairo y poco después obligó a intervenir a Edu tras un centro desde el costado derecho. 

Rufo tiró al palo antes de que el error de Pereira y Ríos dejase el 3-1 a placer al capitán Álex González.

El definitivo 4-1 también tuvo como protagonista a Álex González dejando solo para empujar a placer a un Rufo que castigó enormemente a un Fabril que hizo aguas a nivel defensivo tras el paso por vestuarios.