Marcos Rivas (ADG)
El Bergantiños cayó derrotado ante el Langreo (1-2) y ve, de forma casi definitiva, alejarse el sueño de disputar el play-off de ascenso. La efectividad goleadora del equipo asturiano y la expulsión de Marcos Remeseiro en los instantes finales del primer tiempo sentenciaron al cuadro carballés, que dominó el encuentro de principio a fin. El equipo de Jorge Cuesta demostró valentía y determinación y, a pesar de jugar en inferioridad numérica por la expulsión de Marcos Remeseiro cerca del descanso, encerró al Langreo en su área en una segunda parte en la que se hizo merecedor de, al menos, el empate. Después de sumar su tercera jornada consecutiva sin victoria, las opciones de promoción del Bergan quedan reducidas al mínimo, con el cuadro langreano, que tiene pendiente el duelo contra el Real Avilés (se disputará el próximo miércoles) como mayor amenaza para el filial deportivista, ahora a cinco puntos de la escuadra de Carballo, que tendrá como gran aliciente para las tres jornadas finales la lucha por una plaza para la Copa del Rey.
El comienzo del partido resultó muy igualado. El Bergantiños salió dispuesto a llevar la iniciativa del juego y el Langreo partió con la idea de ejercer una presión alta para dificultar la salida del balón y recuperar lo más cerca posible del área. La primera ocasión del encuentro correspondió al cuadro carballés a los cinco minutos. Álex Pachón dejó el balón de cabeza a Lucas Antañón, que se internó en el área y lanzó un disparo cruzado que se marchó lamiendo el palo. Poco después llegó el primer tanto del Langreo, en su primer disparo entre los tres palos. Álex Menéndez sacó de banda en largo sobre Iván Breñé, el delantero centró al interior del área y allí apareció Guerrero para rematar al fondo de la portería. El cuadro de Jorge Cuesta reaccionó con prontitud y pudo conseguir el empate en el minuto 17. Tras una meritoria doble parada de Adrián Torre, en un barullo dentro del área el balón llegó a los pies de Lucas Antañón, que, con todo a su favor para marcar, acabó rematando al lateral de la red. La presión del Bergan continuó e, instantes después, Álex Pachón remató de cabeza un córner por encima del larguero. Tras estas dos acciones, el dominio territorial carballés continuó, aunque las oportunidades de gol escasearon ante un Langreo que se mostró muy sólido en defensa. El equipo asturiano supo salvaguardar su renta, pero apenas se acercó con peligro por la portería de Santi Canedo. En el minuto 42 se produjo la segunda jugada clave del encuentro. Marcos Remeseiro hizo una entrada con la pierna en alto sobre Juan López y el colegiado cántabro Vega Portilla no dudó en enseñarle la tarjeta roja directa.
Por detrás en el marcador y en inferioridad numérica durante todo el segundo tiempo, las circunstancias no se presentaban nada favorables para los intereses del Bergantiños. Sin embargo, el cuadro local, en una clara muestra de trabajo y compromiso, en ningún momento dio la impresión de estar jugando con un hombre menos y fue el claro dominador del segundo acto. Un Bergan muy valiente monopolizó la posesión del balón y metió en su área a un Langreo que se dedicó a esperar su ocasión para sentenciar el encuentro al contraataque. Una sentencia que pareció llegar en el minuto 51, cuando el bloque langreano consiguió su segundo gol. Guerrero recuperó la pelota, cedió a Juan López y este abrió sobre Iván Breñé, que se internó en el área y lanzó un potente disparo que entró en la portería de Santi Canedo tras golpear antes en el larguero. El encuentro parecía acabado, pero el Bergan no se rindió y siguió buscando con insistencia la portería contraria. Las esperanzas renacieron en el minuto 65 con el 1-2. Antes, Lucas Antañón había protagonizado una gran jugada que desbarató Adrián Torre y Omar había rematado de cabeza al poste un centro desde la banda de Tiago. El gol local se fraguó por la izquierda. Lucas Antañón combinó con Tijan y el centro del lateral fue rematado por Álex Pachón al fondo de la red desde el borde del área chica. El Bergantiños creyó en sus posibilidades e hizo sufrir al Langreo hasta el pitido final. Ya en el minuto 95, el cuadro carballés pudo conseguir el empate, cuando Kensly estrelló un balón en el poste. Sin embargo, la fortuna no estuvo de su parte y la derrota resultó inevitable.