Sin nada más en juego que tres puntos y las famosas dinámicas, el Deportivo Liceo espera la visita del CE Noia, rival histórico en la máxima categoría del hockey nacional. El último partido de la fase regular de la OK Liga, entre el tercero y el segundo de la tabla, se presenta como un ensayo general para los playoffs y una toma de contacto para un hipotético enfrentamiento en las semifinales por el título.
Ninguno de los dos conoce todavía cuál será su rival en la primera eliminatoria, ya que entre el cuarto y el undécimo clasificado hay sólo ocho puntos, un margen que se estrecha a tres entre el octavo y el undécimo, todos con posibilidades de clasificación.
Reus, Calafell, Voltregà, Igualada, Alcoi y hasta Sant Just son los posibles adversarios del Liceo, que tendrá el factor cancha. Es decir, que el primer partido y, en caso de necesidad, el tercero de la serie se disputarán en Riazor.
El Noia, que también partirá con ventaja de campo, podría medirse a Calafell, Voltregà, Igualada, Alcoi, Sant Just, Lleida o Caldes. Todo se decidirá en una última jornada de infarto, con horario unificado y duelos directos. Liceo y Noia esperan en cuartos de final.
Ausente en las dos últimas jornadas (contra el Voltregà en Riazor, 4-4, y en Alcoi, 1-4), el capitán Dava Torres tampoco estará hoy disponible por unas molestias de tobillo. El cuerpo técnico no quiere arriesgar.
Enfrente, destaca el enésimo regreso del mito Jordi Bargalló, que en doce temporadas como liceísta (2002-06 y 2008-16) levantó diez títulos: tres Champions, una OK Liga, una Copa del Rey...