El Leyma Básquet Coruña se topó en Pontevedra con la realidad: su liga, en el debut en la ACB, será otra muy distinta a la que jugará el Valencia Basket, la de la aristocracia. La de un equipo que rozó el 50% en triples, y además lanzado muchos: 19 de 39. Y por elló ganó sobrado (108-85).
A pesar de tener tres bajas notables, Chris Jones, Ethan Happ y Matt Costello, el grupo dirigido por Pedro Martínez fue una apisonadora. Aunque es cierto que no todos los días, y menos cuando empiece lo serio, va a gozar del acierto desde larga distancia que tuvo ayer, especialmente en el primer cuarto.
El triple de Sestina que abrió el marcador fue una señal. El ala-pívot estadounidense, uno de los fichajes más alabados de este verano, no tardó en responder a la expectativas. Volvió a anotar desde la esquina derecha para iniciar lo que sería el parcial del despegue taronja: 0-12. De tres en tres. Sestina, ahora desde el frente, y López-Arostegui, lo hicieron directamente. El internacional español cerró la tacada con un 2+1 que hizo el 6-18.
Las buenas sensaciones del Leyma la pasada semana en Armilla se esfumaron en medio cuarto. Con dudas en ataque y con más dudas –y errores– en defensa, los de Diego Epifanio fueron pasto del dinamismo, el ritmo alto y, por supuesto, la puntería de su rival.
El primer tiempo muerto de Epi no varió lo más mínimo el panorama. Su equipo siguió con dificultades en ataque y el Valencia Basket anotando más y más rápido: cerró el primero acto con 30 puntos, 21 de ellos logrado en jugadas de tres puntos.
La irrupción de Huskic, anotando y asistiendo, revivió –un poquito– a los ayer locales (20-30), pero entró en escena Reuvers, que con siete tantos seguidos aplacó la rebelión.
El Valencia continuó abriendo hueco, ayudado también por los rebotes en ataque. Varios de ellos, por mejor colocación. Otros, cogidos por los jugadores exteriores. Para colmo de males, el Leyma defendió muy mal el bloqueo y continuación. Uno de ellos lo convirtió Pradilla en un cómodo mate y en la primera ventaja de dos decenas (27-48).
El cuadro taronja recuperó en el tramo final los triples perdidos. Uno de Ojeleye y otro de Montero subieron el marcador una nueva distancia máxima (31-54). A partir de ahí firmó el conjunto herculino sus mejores minutos. Y por primera vez en el partido encadenó dos anotaciones. Que fueron tres con dos libres convertidos por Taylor (37-54). Uno de Reuvers bajó el telón de la primera mitad con 37-55, 8 de 19 triples el Valencia y 2 de 13 el Leyma (0 de 7 de Barrueta).
El buen momento se quedó en el vestuario. El Valencia volvió a golpear de tres. Primero, tras pérdida del Leyma; segundo, después de que Barrueta errase su octavo triple. Y una canasta de Pradilla, solito en el poste bajo, puso la distanci al borde de la treintena (37-66).
Epi volvió a parar el partido, en esta ocasión mucho antes que en los dos periodos precedentes. Para lo único que sirvió el tiempo muerto fue para que la desventaja no fuera más allá de los 29 puntos. Porque los suyos continuaron errando buenos tiros y dejando anotar al rival con muchísima comodidad.
Mientras, daba la sensación de que su homólogo se planteaba el resto del encuentro como un entrenamiento. Probando defensas, entre ellas la presión a toda cancha. El Leyma la burló bastante bien, y ello le deparó muchos tiros libres, su principal fuente de anotación en estos 10 minutos, donde únicamente enroscó un triple, el mismo que en cada uno de los dos primeros.
En el baloncesto actual es imposible llegar a algún sitio con un triple por periodo. Aleix Font firmó el del tercer acto. Y el primero del cuarto, que arrancó con 57-81. Pero cuando acertó el escolta catalán el Valencia ya lo había hecho dos veces. Ojeleye mantuvo la tradición taronja de abrir los cuatro periodos con un canasta desde el arco. Y una Pradilla elevó al electrónico el primer +30 (57-87).
Taylor se sumó al festival de la larga distancia –segundo triple del Leyma en tres minutos, uno menos que en los 30 primeros–, pero los de Pedro Martínez acumulaban cuatro en tres minutos y medio. El quinto, obra de Puerto –con el defensor encima, de lado y desequilibrado– valió el punto 100 del Valencia. El sexto, de Sestina, dio a los ayer visitantes la que a la postre sería su máximo superávit (70-103).
La garra de Taylor y Diagne ayudó a descontar en unos minutos finales más sobrantes que nunca, cerrados con un triple del base estadounidense, el tercero de su equipo en el acto final, los mismos que los
Una derrota dura, que puede perfectamente enmarcarse en la lógica absoluta de las pretemporadas –al Leyma también le faltaban Trey Thompkins y Olle Lundqvist–, de la que la mejor lectura que se puede sacar es que todavía hay tiempo para hacer ajustes. Que este partido no era de su liga. Y que este sábado (18.00 horas) se escenificará el primer derbi gallego ACB del curso, ya que en la segunda semifinal el Breogán cedió por 61-63 ante el Mónaco.
Leyma Básquet Coruña, 85-Valencia Basket, 108 |
Leyma (18+19+20+28): Scrubb (7), Taylor (19), Barrueta (3), Lima (10), Burjanadze (8) –cinco inicial– Omar Thiam (5), Jakovics (7), Huskic (4), Diagne (8), Aleix Font (10), Alex Hernández (0), Figueroa (4). Valencia (30+25+26+27): Ojeleye (20), De Larrea (5), Montero (9), Pradilla (9), Sestina (14) –cinco inicial– Jovic (7), Reuvers (11), López-Arostegui (16), Badio (9), Puerto (8), Marí (0), Blanco (0). Incidencias: Primera semifinal del Torneo EncestaRías, disputada en el Pabellón Municipal de Pontevedra. |