A tenor de lo visto en las siete primeras jornadas, el Fundación CB Granada parece condenado a pasarlas canutas, por tercera temporada seguida, en el objetivo de mantenerse en la ACB. La pasada campaña lo logró beneficiándose de un triple empate; en la 2022-23, con un solo triunfo de margen respecto al penúltimo clasificado.

00. Edgar Vicedo. Alero, 2,04 metros. Ocho veces internacional con la absoluta, el canterano del Estudiantes está recuperando el terreno perdido la temporada pasada en el Tenerife, donde fue uno de los últimos de la rotación. Pelea, entrega y rebote.

2. Jonathan Rousselle. Base, 1,92 metros. Está lejos del nivel que exhibió en sus dos primeras temporadas en la ACB, ambas con el Bilbao Basket. Director de juego muy ordenado, por lo cual pierde poquísimos balones. Buena talla y muñeca, aunque este curso anda pésimo en los triples.

3. Gian Clavell. Escolta, 1,93 metros. Cinco años después de jugar en el Estudiantes regresa a la ACB para ejercer de lo que es: un anotador. Fuerte, rápido y con buena puntería desde lejos, aunque no en este tramo inicial de la temporada (29,7% de acierto). 

7. Scott Bamforth. Escolta, 1,88 metros. Responde al célebre perfil ‘raza blanca tirador’. Anota tras bote, en catch & shoot y tampoco rehúye la penetración a pesar de que su talla es de base, no de escolta. Lo de defender lo lleva algo peor. No ha empezado nada bien el curso. 

10. Sergi García. Base, 1,93 metros. El Granada es el octavo equipo ACB de este ‘1’ de maduración lenta, alto, muy físico y gran pasador. La pasada campaña anotó más que nunca en una completa y en la presente mantiene la inercia. Según la web de la ACB es baja para hoy por una lesión muscular; la de su equipo no dice nada al respecto.
 

11. Elias Valtonen. Alero, 2,00 metros. El internacional finlandés está siendo el mejor lanzador desde el arco del Granada, aunque no se prodiga en exceso en esta faceta. Su corpulencia no le resta velocidad y le permite jugar cerca del aro. Ayuda mucho en rebote. 

12. Agustín Ubal. Base, 1,98 metros. El todavía joven jugador uruguayo (21 años) no acaba de explotar. Antes de llegar a Granada como fichado estuvo cedido, por el Barça, en el Breogán, el Bilbao Basket y el Palencia. Y en ninguno cuajó pese a contar con un físico de lujo para un base moderno. 

15. Iván Aurrecoechea. Ala-pívot, 2,04 metros. Debuta en la ACB después de foguearse en la NCAA, en Islandia y en la LEB Oro. Muy fuerte y no carente de buena mano en la pintura, su adaptación está siendo muy dura. No llega a los tres minutos y medio de media en pista. El último de la fila. 

17. Amine Noua. Ala-pívot, 2,02 metros. El máximo anotador del Granada está doblando los números de la pasada campaña con el Andorra. Muy atlético, rápido y con muy buena mano exterior, la falta de centímetros le penaliza contra muchos de los ‘cuatros’ y todos los ‘cincos’ de la liga. 

19. Pere Tomàs. Alero, 2,00 metros. Décimo séptima temporada ACB (siete equipos) para este canterano del Joventut que nunca alcanzó lo que prometía de joven, salvo en la 2016-17, cuando militaba en el Manresa. Sus  minutos este curso han caído en picado. 

24. Jacob Wiley. Pívot, 2,03 metros. Su escasa talla para jugar en el poste bajo no le ha impedido hacer una muy buena carrera en la mejor liga de Europa. Debutó en la campaña 2018-19 promediando 16,5 puntos y 5,2 rebotes con el Gran Canaria. En la presente está en solo 5,9 y 3,3.

32. Rubén Guerrero. Pívot, 2,13 metros. Uno de los jugadores del Obradoiro que siguen en la ACB tras el descenso. Aporta más en defensa, gracias a su talla y pese a ser algo lento de desplazamiento lateral, que en ataque: nunca ha promediado más 6 puntos. 

Pablo Pin. Entrenador, 41 años. El hombre milagro que guio al Granada desde la Liga EBA hasta la ACB en solo nueve años. Lleva 12 en el mismo banquillo, el que más, de largo, en la máxima categoría.