Un Leyma Basquet Coruña penalizado por la ausencia –a última hora– de Lundqvist y de puntería –todo el partido– desde el arco, estuvo a punto de obrar el milagro en la pista del líder, salvado por una canasta de Kapornik a 1.8 segundos del bocinazo final (77-75).
El arranque fue naranja. Bien plantado atrás, el Leyma no concedió un solo tiro cómodo, pero en ataque, pese al 0-4 inicial, abusó de los triples. Y no entraron. Tampoco los del Burgos. De momento.
Aun así, la defensa y cerrar el rebote propio lanzó a los de Diego Epifanio en el marcador (8-15). Y entonces entró en pista Corbalán. El base argentino no sólo cambió el ritmo del duelo, también anotó el primer triple. Un acierto que contagió a sus compañeros.
Llegaron 6 sin fallo desde el final del primer cuarto (14-17) y los tres primeros minutos del segundo. Después del último de esta serie, una penetración del propio Corbalán hizo el 30-23, lo que llevó a Epi a parar el partido. No sirvió de mucho, ya que dos minutos y medio más tarde tuvo que pedir otro tiempo muerto, tras un triple liberado –los naranjas flotaron en exceso a varios jugadores locales– de Ali (35-25).
Este parón sí funcionó. Al menos en el marcador: parcial de 0-4, que llevó a Lolo Encinas a ponerle freno antes de que fuera a más. Y fue, con dos libres de Barrueta que mandaron el choque al descanso con 35-31, un marcador muy bueno para el Leyma... habida cuenta de su terrible 0 de 12 desde el arco.
Galán dejó el hueco en una canasta en la primera acción de la segunda mitad, pero Speights se cargó el Burgos a la espalda y, con los 10 primeros puntos locales del tercer acto, volvió a dar a los de Encinas un interesante distancia de seguridad (45-38).
Huskic fue el soporte naranja en estos minutos, complicados un poco más por dos o tres decisiones arbitrales de dudosa objetividad. Y, por supuesto, por la ausencia de triples. La cuenta negativa siguió creciendo, al mismo ritmo que la obsesión de los visitantes de sumar la primera canasta desde larga distancia. Llegó prácticamente sobre la bocina del periodo. Al 18º intento. Esos 3 puntos de Burjanadze mandaron el partido al último cuarto con 54-47.
Epi puso a sus piezas en zona de inicio. Y el Burgos puso de nuevo el +10 en el electrónico (59-49). Experimento fallido. Tiempo muerto al canto. Y otro muy poco después, tras un triple dañino de Barrera (64-52). Otro de Corbalán estableció unos segundos más tarde luna nueva máxima (67-54). El Leyma se agarró a Huskic y Jakovic, a la defensa... y a 4 libres seguidos fallados por Lapornik, que hasta ese momento llevaba 4 de 44.
Parcial de 0-8 –que no fue de 0-9 porque Jakovics no acertó con el adicional tras enroscar el otro triple del Leyma en los 40 minutos– para resucitar la pelea. Siguió viva hasta el último suspiro. Barrueta erró desde el arco para el 72 iguales. Kasibabu, con un fallo desde el 4.60, y McDonnell, con dos aciertos, mantuvieron a los naranjas con vida. Un palmeo de Huskic valió por fin la igualada. Con 5.7 segundos en el crono.
A Lapornik le sobró 1.8 para resarcirse de sus errores anteriores. En la posesión final, Kasibabu punteó el apurado triple de Barrueta. El 25º del Leyma en el partido. Sólo dos cruzaron la red. (Casi) imposible ganar un partido así.
Miraflores Burgos, 77-Leyma Basquet Coruña, 75 |
Burgos (14+21+19+22): Speight (16), Vene (3), Jiménez (0), Fischer (2), Ali (5) –cinco inicial– Adala (0), Barrera (10), Corbalán (18), Kasibabu (2), Rosa (3), Lapornik (17). Leyma (17+14+16+28): Aris (0), Jakovics (16), Huskic (20), Barrueta (8), Galán (7) –cinco inicial– Diagne (7), Pablo Hernández (0), Aleix Font (8), McDonnell (4), Alex Hernández (0), Burjanadze (5). Incidencias: Partido de la décima jornada de la LEB Oro disputado en el Coliseum de Burgos ante 8.318 espectadores. |