Los italianos Luca Marini y Marco Bezzecchi, cuyo equipo Ducati se ha presentado este lunes en la localidad italiana de Tavullia, piensan en el podio durante la temporada 2023, después de buen inicio de pretemporada que ambos han protagonizado.

Después de diez años en las categorías del mundial de motociclismo, la de 2023 se presenta como la más ambiciosa para el equipo italiano, propiedad del nueve veces campeón del mundo de motociclismo, Valentino Rossi y cuyo "team manager" es el español Pablo Nieto.

Con 231 puntos logrados en la temporada de su debut en MotoGP, un podio, una "pole position", el título de "Rookie" (Debutante) del Año, muchas clasificaciones entre los diez mejores les permite apuntar alto en 2023.

Un conjunto técnico del más alto nivel, que lleva la firma "Made in Italy" de Ducati, la moto Campeona del Mundo en 2022, con Luca Marini, en su tercer año en MotoGP, dicen estar listos para alcanzar grandes objetivos junto a un Marco Bezzecchi, que no se esconde y aspira al mejor resultado desde la primera carrera, el Gran Premio de Portugal, que se disputará el 26 de marzo en Portimao.

Luca Marini dijo estar "muy satisfecho con la pretemporada, la moto es realmente rápida y competitiva; diría que estamos cerca de la perfección ya que en Malasia, el ritmo de carrera fue bueno, la simulación de vuelta rápida fue fantástica y estamos satisfechos".

"Podemos luchar por el 'Top5' cada fin de semana, sólo tenemos que intentar aprovechar al máximo nuestro potencial en los primeros Grandes Premios y creo que con nuestras especificaciones estamos más adelantados en la puesta a punto que quizás los pilotos de los equipos de fábrica, que tienen que desarrollar las nuevas motos", reconoció Marini.

"Hemos preparado al ciento por ciento este campeonato aunque, con la carrera sprint del sábado y luego la carrera del domingo, no sepamos qué esperar ya que la estrategia y la clasificación serán cruciales: en una distancia tan corta, pero muchos pilotos aún podrán luchar con el neumático blando", señaló Marini.

Su compañero de equipo, Marco Bezzecchi reconoció que le gustaba mucho "la moto de la temporada pasada, ¡pero con la versión totalmente negra hemos metido una marcha más! Estoy contento con los entrenamientos, me siento bien con la nueva moto y enseguida he notado la diferencia".

"La conexión con el acelerador es lo más claro, en comparación con la moto anterior, y luego también el paquete aerodinámico, si bien será duro tener dos carreras en el mismo fin de semana, al menos al principio, incluso sólo para entender cómo gestionar el cuerpo", ha destacado Bezzecchi de la carrera al sprint.

"Quiero ganar mi primera carrera, ese es el objetivo. Empezamos con un paquete técnico ya configurado, competitivo y rápido y estamos preparados, quizás más que los pilotos oficiales, al principio, aunque luego llegarán, sin duda, pero ahora tenemos que aprovecharlo al máximo", afirmó sin dudar el italiano.