El entrenador del Lugo, Rubén Albés, se despidió del equipo gallego después de haber logrado dos permanencias en LaLiga SmartBank y, en la víspera del partido con el Málaga, aseguró que “lo mejor” para el conjunto gallego es que “no continúe” y afirmó que odia “el confort” y que busca “retos” constantemente.
“Entiendo que lo mejor para el Lugo es que Rubén Albés no continúe y yo me siento apoyado para buscar otras posibilidades. Soy muy joven y entiendo que es mi manera de crecer. Es complicado de entender, pero odio el confort y busco retos”, comentó en una rueda de prensa en el Anxo Carro.
El técnico, que ya había confirmado su salida del club a la conclusión de la presente temporada, dijo sentir “una mezcla de alegría y morriña”.
“Pero en la vida hay que tomar decisiones. Quizás hemos tomado la decisión más complicada porque es más fácil estar en el confort y la estabilidad”, admitió.
Albés, que se hizo cargo del equipo hace poco más de un año, consideró que el “balance” de su etapa en Lugo es “positivo”.
“Estoy muy feliz. Construimos un modelo en relación al Lugo y los jugadores del Lugo. Eso no es sencillo y me hace estar feliz. Conseguimos dos permanencias, la primera cerca de milagrosa y la segunda con la tranquilidad de hacer las cosas bien”, recordó.
Se consideró una “persona valiente”, que trata de retarse “constantemente” y descartó que su marcha tenga que ver con diferencias con el presidente del club, Tino Saqués, que no le acompañó en la rueda de prensa, en la que sí estuvo el director deportivo, Mauro Pérez.
Así, destacó la “facilidad de trabajar con el presidente y la dirección deportiva” y afirmó que su cuerpo técnico se sintió “valorado y querido”, algo que, precisó, “no es fácil de encontrar”.
Además de Albés, se despedirán los tres capitanes del equipo: Carlos Pita, Fernando Seoane e Iriome González.
“Los capitanes son importantes para el club, para todo lo que rodea al Lugo. Es difícil encontrar unos capitanes del nivel humano de estos, que dejen el ego a un lado, sean ejemplo de muchas cosas, las hayan vivido de todos los colores. Eso al final se infecta al resto de trabajadores, no solo de la plantilla. No es casualidad que el Lugo con estos tres jugadores haya estado tantos años en Segunda”, declaró.
Añadió que es algo “que no tiene que ver solo con lo futbolístico, que va más allá”, y consideró que “deben ser eternos para el Lugo, porque el pasado ayuda a construir buenos futuros”.
Con todo, afirmó que el club afronta “un cambio de ciclo porque se van las tres personas más importantes del Lugo en su historia”.
“Yo soy una parte pequeñita, un entrenador que ha colaborado, que llegó con perfil bajo y se quiere marchar con perfil bajo, pero las personas que han sustentado este club no van a estar y ahora queda el reto de tratar de construir algo mejor sin ellas y es un reto exigente”, expuso.
El responsable del área deportiva, Mauro Pérez, lamentó perder “un gran entrenador y un grupo espectacular de personas”.
“Es un cuerpo técnico muy cualificado y predispuesto al trabajo, un grupo de los más profesionales que me he encontrado. Ha tenido capacidad de liderar y de aglutinar”, valoró.