La UD Logroñés presentó ayer al defensa central Aitor José Arregi y al centrocampista Pape Maly Diamanka, fichados en el este mercado de invierno y que debutaron el pasado fin de semana con la camiseta blanquirroja.
“He visto bien al equipo, con confianza, somos optimistas”, subrayó el zaguero de Bergara, quien se mostró feliz con la “unión” que se respira en el vestuario riojano.
“Hemos encontrado un vestuario unido”, señaló.
El futbolista guipuzcoano, que el pasado jueves se desvinculó de la SD Amorebieta, de Segunda División, para fichar por el equipo de Logroño, dejó claro que llega a Las Gaunas con el objetivo de “dar el cien por cien y ser profesional”.
El central de 31 años, con una trayectoria profesional de casi 250 partidos entre Segunda División y la categoría de bronce, aseguró que “puedo aportar ese granito de experiencia.
Arregi ya fue titular con la UD Logroñés el pasado domingo, en el empate de los riojanos en casa del San Sebastián de los Reyes (1-1).
El defensa, llamado a ser una pieza importante en el engranaje del conjunto que entrena Mere Hermoso, disputó los noventa minutos.
Por último, el futbolista vasco dejó claro el importante papel que debe jugar la afición blanquirroja en lo que resta de temporada para ayudar al equipo a conseguir el ascenso.
“Les necesitamos más que nunca porque hay mucha igualdad”, indicó.
El senegalés Diamanka, por su parte, se mostró feliz de lo rápida que ha sido la adaptación tanto suya como de Arregi al vestuario riojano.
“Venimos a ayudar y creo que lo vamos a hacer bien”, manifestó el mediocampista de 32 años.
El veterano jugador se encontraba sin equipo, tras desvincularse del Girona el pasado verano.
El mediocampista llega a aportar “trabajo” y afirmó que está “comprometido” con el proyecto riojano.
Además, la UD Logroñés anunció el fichaje del delantero soriano Rodri Ríos, que ha jugado 220 partidos y suma casi media centena de encuentros en Primera y otros 52 partidos en la categoría de bronce del fútbol español.