El Lugo y el Leganés se citan este domingo desde la igualdad en la clasificación y en una aparente tranquilidad, lejos de las posiciones de descenso y también de las que permiten luchar por subir de categoría, con dos técnicos que exprimen a sus equipos desde el carácter y la personalidad y con morbo por el regreso de Nafti al Anxo Carro.
El técnico franco-tunecino debutó en el fútbol profesional con el Lugo la temporada pasada, fue el segundo entrenador del equipo gallego ese curso, en el que se sentaron cuatro técnicos en el banquillo rojiblanco, y el club le despidió cuando estaba fuera de los puestos de descenso, pero en una dinámica negativa de resultados, justo después de haberse saltado la burbuja anticovid de LaLiga en Almería, donde no pudo ejercer.
Tras Nafti, Luis César empeoró sus marcadores y el equipo se vio abocado a luchar por la permanencia de una manera agónica. Rubén Albés, el actual técnico, le rescató cuanto parecía ya equipo de la categoría de bronce.
Albés asegura que ni en el fútbol ni en el carácter se parecen, pero sí admite que los dos han dotado de personalidad a sus equipos, que están empatados con 45 puntos.
El preparador rojiblanco dijo que percibe cierta relajación en el entorno después de haber llegado a esa puntuación que esta temporada puede bastar para lograr la permanencia y advirtió de la importancia de sellar el objetivo de manera matemática.
Para este partido tiene las bajas de Juan Antonio Ros, David Mayoral, Álex Pérez y Joselu Moreno, al igual que en la anterior jornada, en la que el equipo cayó en el derbi de Los Ancares ante la Ponferradina (3-1).
Carrillo, Chris Ramos, Sebas Moyano y Juanpe Jiménez son algunos de los candidatos a regresar al once del Lugo para enfrentarse a Nafti y suplir en él a otros como Manu Barreiro, Cuéllar o Iriome.
En el caso del Leganés sus aspiraciones de playoff se han visto dinamitadas en las últimas fechas, después de sumar solo una victoria en seis partidos y tres derrotas en los cuatro más recientes.
El más inmediato fue en casa contra el Málaga, cuando cayeron por 0-3 dando una imagen mejorable. Fue otra losa más para un equipo que aspiraba en el arranque del curso a subir, que en el tramo inicial se vio inmerso de lleno en la lucha por la salvación y que si bien ha esquivado esa bala parece haber dejado a algunos aficionados con ganas de más.
Ahora no tendrá nada por lo que luchar en las jornadas finales aunque más allá de los puntos, la continuidad de algunos miembros de la plantilla podría depender de lo que suceda. Es el caso del entrenador Mehdi Nafti.
Este volverá a la que fue su casa también en el banquillo y lo hará con el objetivo de que se mantengan los precedentes más inmediatos entre ambos, favorables para los madrileños pues solo perdieron en uno de diez.
De cara a esta cita la plantilla contará con las bajas por lesión de Javier Eraso, José Luis García del Pozo ‘Recio’, Yoel Bárcenas y Luis Perea. Además se lo perderá por acumulación de amonestaciones el defensa Sergio González.