El Granada sumó su segunda victoria seguida en casa, y se coloca a diez puntos de la salvación con quince en juego, al ganar este domingo en el Nuevo Los Cármenes por 3-0 a un flojo Osasuna, que ya sin nada en juego en esta liga enlaza tres derrotas consecutivas.

El uruguayo Facundo Pellistri adelantó al Granada en un primer tiempo igualado y de pocas ocasiones, mientras que en la segunda mitad el albanés Myrto Uzuni amplió la ventaja y puso la guinda al triunfo en el tiempo añadido el argentino Lucas Boyé.

La primera parte fue tan equilibrada como aburrida, con un Granada aguerrido pero con pocas ideas y un Osasuna fino con el balón aunque muy poco incisivo.

No pasó nada destacado en el primer cuarto del choque y la primera llegada peligrosa a una de las áreas acabó en gol, con el tanto firmado por Pellistri en el minuto 29.

El uruguayo definió bien ante Sergio Herrera tras asistencia de Sergio Ruiz y con una defensa osasunista demasiado contemplativa.

La respuesta del equipo dirigido por Jagoba Arrasate fue buena, con una gran ocasión para empatar de Raúl García de Haro ante el argentino Augusto Batalla, que le ganó la partida en su guerra particular.

A balón parado pudo empatar Alejandro Catena, que no dirigió bien su cabezazo, mientras que la opción rojilla más clara para empatar fue doble de Raúl García de Haro, la primera con un remate al poste y la segunda mandando fuera el balón tras recoger el rechace.

La segunda parte comenzó con el 2-0 marcado por el Granada, en el minuto 48, al superar Uzuni a un estático Sergio Herrera en el mano a mano tras buena asistencia del polaco Kamil Jozwiak.

Esta vez no hubo reacción osasunista, sino que Uzuni rozó de nuevo otro gol poco después en pleno festival de juego de los rojiblancos, que se permiten pequeñas alegrías pese a tener un pie y medio en Segunda.

Osasuna, con casi todo perdido, trató de irse hacia arriba en busca de la remontada y Batalla volvió a lucirse en otro intento de Raúl García de Haro, mientras que a la contra perdonaron de nuevo el tercer gol local tanto Jozwiak como Uzuni.

Los últimos minutos sólo sirvieron para confirmar la floja actuación de Osasuna, que ya sin nada en juego en este liga estuvo muy plano y pusilánime durante todo el partido, y para que Lucas Boyé marcara el 3-0 final en la última jugada del choque.