El Deportivo dio un paso más en la preparación del encuentro de este domingo al mediodía ante el Talavera en el Abanca Riazor con un entrenamiento de casi dos horas en Abegondo, con todos los jugadores de la primera plantilla a disposición de Borja Jiménez.
Una buena noticia en el contexto de la sexta ola de la pandemia por coronavirus, que ha dejado a muchos equipos de la Primera RFEF tocados por las bajas debido a los positivos.
El cuadro blanquiazul, de momento, los ha ido prácticamente esquivando, y en la jornada de ayer el técnico de Ávila aprovechó para ‘exprimir’ a su plantilla, en la que el recién llegado Álvaro Rey ya es uno más de sus integrantes.
El entrenamiento comenzó con un circuito y a continuación el cuerpo técnico dividió a los jugadores en dos grupos para realizar ejercicios de rondos. Tres futbolistas en el centro trataban de robar el balón ante sus compañeros, bajo la atenta mirada tanto del propio Borja como de su segundo, Álex Martínez, ambos dando instrucciones, al igual que el preparador Luis Fandiño.
EL DETALLE
El técnico probó diferentes onces intercalando titulares con suplentes
Mientras, los porteros Pablo Brea, Brais Suárez e Ian Mackay trabajaban en el lateral del campo tres bajo la dirección del preparador de porteros Alberto Casal.
Para la siguiente tarea se fueron intercalando bajo palos los tres, en un ejercicio de fútbol a todo campo, en el que Borja hizo dos onces, en los que mezcló titulares con suplentes. El equipo más reconocible estuvo formado por Héctor, Jaime, Trigueros (aunque lo habitual es que ejerza Adrián Lapeña en esa demarcación) y Víctor García, centro del campo para Juergen y Bergantiños, De Camargo por la izquierda, Quiles por la derecha, Noel de enganche y arriba Miku.
Borja fue cambiando los onces varias veces durante toda la sesión. Incidió en aspectos como ajustar las líneas de pase, saber qué jugador tenía que ir por dentro o en la importancia de las vigilancias.