La derrota del pasado viernes 13 en Córdoba ha dejado un poso de amargura en el entorno de un Dépor que este sábado está obligado a la reacción ante el Burgos en Riazor (18.30 horas) para abandonar la zona roja de la clasificación.

Aunque hasta la fecha solo han transcurrido cinco jornadas de la Liga en Segunda, los herculinos apenas han sumado cuatro puntos sobre 15 posibles; una puntuación quizá inferior a sus méritos pero que obliga a la escuadra de Imanol Idiakez a exhibir una metamorfosis profunda frente a un rival en zona de playoff, asentado en su cuarta campaña consecutiva en la división de plata.

Los blanquiazules, con la única baja por lesión de Sergio Escudero, deben efectuar diversos ajustes en su desempeño para obtener el equilibrio necesario en su vuelta al fútbol profesional. En este sentido se antojan cruciales la recuperación del blindaje defensivo (solo dejó su puerta a cero ante el Racing de Ferrol) y el acierto de cara al marco contrario (en El Arcángel dejó pasar hasta cuatro opciones nítidas de gol).

Imanol Idiakez, míster deportivista, apostará por un once similar al de las últimas jornadas, si bien podría introducir novedades en cuanto al puesto con más incógnitas esta temporada, el lateral izquierdo.

"El Burgos es un equipo muy bien hecho, un rival rocoso, difícil... un equipo que te exige trabajarte el partido, sabe competir y tiene individualidades. Nos están penalizando las dos áreas", avisó el técnico ayer en sala de prensa acerca de su contrincante de esta tarde.

Siempre con Helton bajo palos, la defensa estará integrada por Pablo Vázquez y Pablo Martínez en el eje de la zaga, flanqueados por Ximo Navarro en la derecha y David Mella en la izquierda. La posible apuesta por Villares en el 'carril del 2' desplazaría al granadino al costado siniestro.

En la sala de máquinas del equipo, José Ángel es un fijo, bien sea acompañado por Villares, Soriano o incluso Mfulu.

Como trescuartistas, Yeremay y Lucas tienen garantizada su presencia, con la duda de Mella o Soriano por detrás del delantero centro, que podría recaer de nuevo en Mohamed Bouldini.

En el banquillo de la suplencia aguardarán su turno futbolistas de perfil ofensivo como Iván Barbero, Cristian Herrera, Gauto, Davo, Hugo Rama o Charlie Patiño, que todavía no ha podido estrenarse en partido oficial con el Dépor.

Enfrente, el Deportivo se topará con un Burgos asentado en zona de promoción (con 10 puntos), en su cuarta campaña seguida en Segunda, la segunda de su actual técnico Jon Pérez Bolo.

Después de dos victorias consecutivas, la última de prestigio frente al Zaragoza, el técnico vasco dará continuidad salvo sorpresa al once que desbancó a los maños el pasado fin de semana en El Plantío (1-0).

De esta forma, la alineación inicial de los castellanos estará integrada por Cantero; David López, Arroyo, Aitor Córdoba, Miguel; Curro Sánchez, Morante, Atienza, Sancris; Córdoba y Espiau.

La única variante que se plantea el técnico visitante es la introducción de más músculo en el doble pivote para contener las embestidas blanquiazules, con la entrada de Appin en lugar de Morante. Para esta cita la única ausencia por lesión de los visitantes es la de Javi López-Pinto.

En la meta burgalesa formará de inicio un cancerbero como Ander Cantero, un ex del Racing de Ferrol que ha sido tanteado a lo largo del verano por la entidad de la Plaza de Pontevedra.

El 'jugador número 12' deportivista marcará de nuevo la diferencia en la Liga Hypermotion, con otra gran entrada como la que se presume a cargo de una afición que ya ha sobrepasado en casi medio millar los 29.007 abonados con los que el club clausuró el pasado ejercicio 23-24.

Como local esta temporada el Dépor ha sumado tres puntos de seis, los logrados en el derbi provincial ante el Racing de Ferrol (1-0). A buen seguro que el 'efecto Riazor' empujará a los herculinos hasta el segundo éxito del equipo coruñés.