El regreso tras cesión de Mario Soriano y la contratación de tres refuerzos para la temporada venidera 24-25 (Luis Chacón, Álex Petxarroman y Sergio Escudero) han propiciado que las prioridades del director deportivo blanquiazul Fernando Soriano se centren ahora mismo en determinadas parcelas del campo.
A día de hoy, el Deportivo peina el mercado en búsqueda de un portero, un mediocentro, un extremo y un delantero centro.
El mánager deportivista desveló que los movimientos en los que se encuentra centrado obedecen a las dos primeras demarcaciones.
No en vano, Fernando Soriano confía en que en las próximas fechas el equipo pueda gozar ya de la presencia de un cancerbero que compita por la titularidad con Germán Parreño y de un pivote completo que pueda fortalecer una línea en la que el club solo dispone ahora mismo de José Ángel, Villares y Rubén López como futbolistas específicos.
Como arquero ha venido sonando con fuerza el nombre del ya exdeportivista Marc Martínez, mientras que en la sala de máquinas el club coruñés está sondeando la opción del exrealista Rubén Pardo.
La idea del director deportivo aragonés es que las dos caras nuevas puedan conocer a sus nuevos compañeros y rodarse ya en la minipretemporada que el club acometerá en tierras portuguesas la próxima semana, en la que el Dépor se medirá al Famalicao (30 de julio), Gil Vicente (31 de julio) y Chaves (3 de agosto).
La entidad de la Plaza de Pontevedra, previsiblemente, dejará en un segundo plano la hipotética contratación de hombres de ataque. Y es que el Deportivo se afanará por dotar al cuerpo técnico de Idiakez de la mayor pegada posible, con un extremo y un ‘9’ diferente a Barbero y Alcaina como principales pretensiones en la vanguardia.
Así pues, el Deportivo ha puesto toda su maquinaria a funcionar para acelerar las negociaciones por hombres capaces de mantener e incluso incrementar el nivel bajo palos y en la medular.
La buena marcha en el despacho de abonos en pretemporada y también la adhesión del Dépor a los fondos CVC promovidos por LaLiga han sido dos factores determinantes a la hora de que el Deportivo pueda ver aumentado el tope salarial con el que planificar la próxima campaña 24-25.
Mientras que a inicios de curso se barruntaba una cantidad global que superaría en poco los cinco millones de euros, a repartir entre los componentes del equipo masculino y el femenino del club, lo cierto es que las inyecciones de ingresos han elevado el techo económico blanquiazul hasta casi los diez millones de euros.
Una cifra nada desdeñable para un conjunto recién ascendido que no renuncia a nada el año que viene a nivel deportivo.
Estos guarismos permitirán a la Dirección Deportiva de Fernando Soriano pujar por un selecto grupo de futbolistas capaces de marcar la diferencia.