“Bendita locura, bendita locura”, decía Lucas Pérez tras el ascenso y antes de ser manteado sobre el verde de Riazor.

“Quiero dar las gracias a todos, pero también a Álex Bergantiños, que se lo merecía y me quiero acordar también de Ian Mackay, que es un deportivista y coruñés como el que más, también se lo merecía y quiero acordarme también del doctor Lariño”, afirmaba el de Monelos en el micro a pie de campo ante un Riazor a reventar.

En el recuerdo

Un mensaje lleno de significado, hablando de tres figuras de la historia del Depor, con Bergantiños como uno de sus capitanes, que colgó las botas el curso pasado y que pasó a ser consejero, después de despedirse sobre el verde en agosto de 2023, en el Teresa Herrera, en el homenaje a él y a Mauro y Bebeto. Un puesto que, según ha podido saber este diario, puede dejar, a tenor de su ausencia en los últimos acontecimientos.

Fue una de las ‘bajas’ que se hizo notar en este domingo durante la celebración y posteriormente en los actos de homenaje en los que ha participado el Deportivo, con la visita al Pazo de Raxoi, a la Diputación de A Coruña y a la sede de ABANCA.

De momento, el futbolista, siempre discreto, guarda silencio, pues sabe que el foco tiene que estar ahora en ese ansiado ascenso logrado por el Depor. 

Como consejero ha tenido un perfil bajo, prefiriendo trabajar lejos de los focos y en los partidos en Riazor ocupando su asiento en la grada, junto a su familia y no en el palco, donde se ubica el resto del Consejo.
Sin embargo, ha sido un habitual en los entrenamientos en Abegondo, siguiendo muchas veces las sesiones desde la atalaya, la última vez hace alrededor de un mes.

Vive desde fuera una vuelta a Segunda a la que él se quedó a las puertas ante Albacete y la campaña pasada en las semifinales contra el Castellón. Otro de los nombres de los que no se olvidó Lucas fue el de Mackay. Su salida, un tanto abrupta, se produjo el pasado 10 de enero. Lo anunció el Depor y el jugador compareció en la sala de prensa de Riazor y leyó un comunicado, sin preguntas. Un acto en el que estuvieron los capitanes del Depor (él también lo era), Pablo Martínez, Diego Villares, Lucas Pérez y Mikel Balenziaga, además de Jaime, el propio Bergantiños y el delegado Pablo Barros.

El meta, que reconoció que pensó en colgar las botas, lamentó no poder seguir y ayudar a lograr el ascenso: “No puedo seguir ayudando desde dentro a que se cumpla, pero seré un aficionado más”. Otro adiós, este en el mes de octubre, era el del doctor Carlos Lariño, que salía del club tras 17 años. Este curso había pasado al organigrama del Depor ABANCA, tras la activación del Servicio de Atención al Rendimiento del Futbolista, dirigido por Alejandro Mejuto.

Una marcha del club que se resolvió con un comunicado y con el facultativo recalando en la Real Federación Española de Fútbol.

Tres nombres propios dentro del Deportivo que Lucas llevó a la actualidad en esta celebración, en los que puso el acento un capitán blanquiazul que sabe muy bien lo que dice y el mensaje que quiere mandar. En el aire una pregunta, ¿qué pasa con Bergantiños”.