El lunes por la tarde la familia de Arsenio Iglesias fue invitada por el Deportivo a la presentación privada de las tres camisetas oficiales para la temporada 2024-2025, todas ellas con un guiño hacia la figura del ‘Zorro de Arteixo’.
Pablo Iglesias, hijo pequeño de Arsenio e incondicional blanquiazul, no falló a una cita que encerró connotaciones muy especiales para todos sus allegados. “La verdad es que mi padre tenía apego cero por lo material y nunca coleccionó prendas deportivas de las que empleó, pero está claro que vamos a comprar las tres camisetas porque es un orgullo, es un detalle precioso del club, que se ha documentado muy bien y ha realizado un gran trabajo”, expuso.
Poco más de un año después de la desaparición de una de las mayores leyendas del Dépor, tanto en su faceta de jugador como de entrenador, sus familiares se emocionan al rememorar su figura. “La verdad es que el Deportivo se ha portado de maravilla con nosotros. Ha hecho un gran esfuerzo por honrar a mi padre y a sus momentos más destacados en el club. El Ayuntamiento de A Coruña y la Xunta también se portaron fenomenal con nosotros, la verdad es que estamos todos muy agradecidos. No podemos decir ni una
palabra mala de nadie, estamos felices”, expuso.
Asiduo del estadio de Riazor junto a su hijo Pedro, Pablo tuvo palabras de elogio también para los aficionados herculinos. “Los tifos que vimos de mi padre con Bebeto o Martín Lasarte fueron sumamente emocionantes para nosotros, nos pusieron la piel de gallina”, recuerda emocionado.
En relación a la confección de la zamarra blanquiazul en sí misma, Pablo Iglesias subraya que “nos parece muy bonita, sencilla, como eran las camisetas de la época en los años 50”. “Según nos dijeron en la plaza de Pontevedra, está inspirada en la que lució el equipo cuando jugaba mi padre en la temporada 54-55, en concreto cuando el Deportivo realizó una gira por Sudamérica. La gente del club ha realizado un gran trabajo de documentación”, elogió este coruñés socio de Preferencia Superior.
“Cada una de las tres camisetas cuenta una historia diferente pero todas son bonitas; en los tiempos de mi padre no se coleccionaban porque igual tenían dos o tres para toda la temporada y se lavaban una y otra vez. Él no era mucho de guardarlas para el recuerdo. Era mi madre la que se encargaba de hacerlo. Conservamos sobre todo trofeos y placas”, finaliza Pablo Iglesias.