Todavía quedan casi tres semanas para el derbi gallego en Riazor entre el Deportivo y el Arenteiro, que se jugará el próximo domingo 28 de abril, pero el club de O Carballiño cuenta con un problemón en la portería de cara a ese duelo. El Arenteiro tiene a dos porteros lesionados, Diego García y Manu Figueroa, y Pablo Brea, cedido por el Deportivo, tiene en su contrato una cláusula que estipula una penalización económica, confirmada por fuentes del club coruñés, si es alineado en el choque en Riazor.

Diego García, titular indiscutible en el Arenteiro, se lesionó de gravedad el pasado domingo ante el Barça Atlètic. El club ourensano informó de que Diego fue operado con éxito de una rotura completa del tendón de Aquiles y su tiempo estimado de baja es de seis meses.

Pablo Brea ocupó su lugar en el campo y fue clave para que el Arenteiro sumase un empate en un feudo difícil como el Johan Cruyff (1-1). El canterano del Deportivo se postula como el titular en los próximos encuentros pero la conocida como cláusula del miedo le aleja del choque contra el club herculino.

Brea fue convocado en el partido de la primera vuelta ante el Depor en O Espiñedo pero no tuvo que actuar.

Manu Figueroa, tercer portero, también está lesionado, así que el Arenteiro tiene dos opciones de cara al partido ante el Depor: alinear a Pablo Brea y abonar la cláusula o, lo más probable, fichar a un portero que se encuentre en paro.