Recibido con más palmas que pitos, el cancerbero coruñés y exdeportivista Ian Mackay regresaba a Riazor como claro protagonista del encuentro bajo el marco del Eldense.

A la postre, el guardameta del Ventorrillo se convirtió en salvador de su conjunto, con hasta cuatro intervenciones decisivas a lo largo de los noventa minutos con las que consiguió evitar la derrota de su conjunto.
 

“El mejor del equipo rival fue su portero, ha tenido una gran actuación, igual que Dituro la semana pasada. El portero rival hace el partido de la temporada con nosotros pero no queremos buscar excusas”, señalaba en rueda de prensa el entrenador local Imanol Idiakez.
 

Mackay erigió su particular muro desde el minuto 12, cuando sacaba una mano prodigiosa después de un gran disparo con la derecha desde fuera del área de Yeremay; el arquero voló para enviar el balón a saque de esquina ante la desesperación del atacante canario y del público de Riazor.
 

El portero coruñés, sin embargo, poco o nada pudo hacer ante la conexión entre Lucas Pérez y Moha Bouldini, que el delantero marroquí cabeceó a la red de modo inapelable en el 1-1 en el minuto 25.
 

Ocho minutos más tarde el recital de Ian asistiría a otro nuevo destello, precisamente ante el autor del tanto blanquiazul, desbaratando una nueva llegada del ‘24’, que a punto estuvo de lograr un doblete en un suspiro.
 

Tras el paso por los vestuarios en el intervalo, Mackay regresó a su mejor versión; eso sí, tras un error de cálculo en una salida por alto, en una acción en la que propinó involuntariamante un golpe en la cabeza a Dani Barcia.
 

Tal vez la parada del encuentro la firmó el del Eldense en el minuto 55, después de una acción espectacular de Yeremay, que recortó en el área y se sacó de la chistera un zurdazo fuerte abajo.
 

Mackay mantuvo su brazo derecho firme con una fuerza descomunal para mandar a córner una oportunidad más que nítida, incrementando la impotencia del entorno local.
 

En los minutos postreros de la contienda, cuando el Deportivo protagonizaba el arreón final en su afán por embolsarse los tres puntos, Cristian Herrera recibió un pase espectacular de Lucas Pérez para encarar la portería visitante.
 

El punta canario proyectó un disparo con su pierna izquierda que también fue interceptado con acierto por el ‘13’ visitante.
 

A la conclusión del choque correspondiente a la décima jornada en Riazor su propio entrenador, Dani Ponz, se rindió a la actuación sobresaliente del cancerbero coruñés.
 

“Siempre ha estado cuando se le ha necesitado. Es de aquí, es un deportivista de pro y ha sido un partido especial para él, se ha ganado la ovación de la afición. Ha estado sensacional en los momentos malos y debe estar satisfecho”, puso de relieve el técnico.
 

Tras el pitido final del navarro Galech Apezteguía, Ian Mackay se abrazó con Lucas Pérez y Hugo Rama en el centro del campo, casi más preocupado por despedirse de sus compañeros deportivistas que de la hinchada del Eldense, que celebró por todo lo alto el punto arañado en Riazor.