Cuatro días después de sufrir un serio revés en A Madroa contra el Celta, un 3-0 en contra ante el eterno rival que supuso, además, la caída del primer puesto después de muchas jornadas en lo alto de la tabla, el Juvenil A del Deportivo se reencontró con la victoria y, lo más, importante con buenas sensaciones. Contundente triunfo por 0-4 En El Requexón ante un Real Oviedo que aspira a clasificarse para la Copa del Rey.

Miguel Figueira, entrenador del conjunto blanquiazul, iintrodujo novedades en su once inicial en todas las líneas. Uno de los nombres propios del partido fue el del lateral derecho Vergara que, además de salir de inicio, fue el encargado de abrir la lata a los 16 minutos.

En una de las primeras aproximaciones con relativo peligro del Dépor al área del Oviedo, la defensa local cometió falta en una zona peligrosa. Álvaro, el ‘10’ blanquiazul y uno de los especialistas en acciones a balón parado, ejecutó el tiro franco. Mateo, portero local, consiguió desviar la bola, que quedó suelta en el área. Vergara, más atento que los adversarios que tenía cerca, consiguió meter la pierna para que el cuero acabase en la red.

No se echó atrás el Dépor por el hecho de tener ventaja en el marcador sino que siguió atacando tratando de hacer daño a un Oviedo al que no le quedaba otra que exponerse cada vez más. Y llegó el segundo de la escuadra coruñesa a los 28 minutos. El gran y único protagonista fue Álvaro, que inició una conducción por el carril central regateando a varios rivales hasta encontrar acomodo para sacar un disparo espectacular que fue directo a la escuadra.

El aluvión blanquiazul no paró y en el minuto 45, el delantero centro Rubén Fernández dejó el choque prácticamente visto para sentenciar al anotar el 0-3 tras una dejada de pecho de Lucas y un remate pegado al palo.

Con una ventaja de tres goles para empezar el segundo período, el Deportivo fue listo administrando esfuerzos después de jugar el domingo anterior contra el Racing y el miércoles ante el Celta, dos rivales directos.

Ël equipo de Miguel Figueira apenas sufrió a nivel defensivo y los jugadores que entraron de refresco en la segunda mitad aportaron dinamismo. Uno de ellos, Balbas, asistió a Lucas con un pase atrás para que el mediocentro que llegó al Dépor procedente del Arosa firmase el definitivo 0-4 desde el área pequeña.
El Deportivo sigue segundo a dos puntos de un Celta que sufrió para ganar en A Madroa (2-1) a un Choco en zona de descenso.