Óscar Gilsanz sigue teniendo muy clara la hoja de ruta y no desvía la mirada del siguiente partido. No para fijarse objetivos más allá de los tres puntos de cada semana, tampoco para hablar de una posible renovación. Prefiere que sigan siendo los resultados los que se pronuncien por él. También el trabajo diario en el que elogia a los que menos minutos están teniendo y que pueden ser fundamentales en el final de temporada.
Ilusión: "Creo que es normal que la gente se ilusione cuando tienes buenos resultados. Evidentemente, los datos dicen que estamos a seis del playoff y a nueve del descenso. Es normal que la gente se ilusione, pero también esos mensajes de tranquilidad que mandamos, también son de ilusión. Vamos a tener que adaptar los entrenamientos porque estos días los entrenamientos fueron de mucha intensidad, y ahí es donde quiero ver a los jugadores. Escuché a varios entrenadores de los buenos que dicen que el mejor momento de un equipo es cuando tiene confianza, la sensación de que puede ganar a cualquiera, pero sabiendo dónde está y que cualquiera te puede hacer daño. Es una buena sensación. Si no tienes confianza, no estás al máximo, pero si tienes confianza y no estás alerta... Los entrenamientos de esta semana me transmiten que el equipo está en un buen momento, muy buenas sensaciones en cuanto a confianza y ambición, pero también con la cautela de ir paso a paso. Solo Mirandés, Anduva… que es un partido para estar con los ojos bien abiertos y todos los sentidos puestos en el partido".
Mejor momento: "En dos días tenemos un partido que nos va a examinar esa capacidad, esa mentalidad que queremos que tenga el equipo, de saber que hay momentos del partido en los que vamos a estar incómodos, y el Mirandés es ese equipo: un partido muy incómodo durante 90 minutos. Esa ilusión, ese reto, esa mentalidad fuerte que creemos que estamos construyendo, tiene que manifestarse. Cuando enfrentas un partido, siempre piensas que significa mucho porque piensas que es el más importante. Afianzar confianza, dejar buenas sensaciones… tenemos que afrontar este partido no pensando en lo que puede suponer, sino en el reto que es el propio partido. Un rival que hace los partidos muy difíciles, sobre todo por la incomodidad de tener que ganarle duelos continuamente. Gana duelos en todas las zonas del campo. Tenemos que estar tan centrados en lo que va a pasar en los 90 minutos… venimos de dos victorias seguidas y queremos alargar esas sensaciones de que el equipo va a más".
Mirandés: "Todos los partidos tienen ciertas particularidades. El Mirandés es un equipo que, más allá de su estructura con tres centrales y dos carrileros, con dos delanteros de perfil distinto… siempre añade situaciones de dificultad. Pero más allá de eso, gana duelos en todas las zonas del campo. Jugar contra un equipo que, si lo aprietas, juega en largo para ganar el duelo, pero si no lo aprietas, es capaz de ir progresando… plantea una dificultad que supone un reto ilusionante el poder adaptarse y competir un partido con esas circunstancias".
Partido de ida: "Veníamos de una victoria entre semana contra el Castellón con un resultado amplio. Ni fuimos tan inferiores al Mirandés, ni tan superiores al Castellón. En el término medio, hasta el primer gol el partido fue igualado. A partir de ahí el Mirandés fue muy superior a nosotros, sobre todo en transición. Tenemos que aprender de esas cosas. Eso nos puede enseñar por dónde puede discurrir el partido, pero no creo que un resultado condicione la diferencia entre dos equipos".
Revancha: "Las derrotas siempre duelen, las abultadas más. Pero los partidos son todos diferentes. Si ahora mismo no fuéramos a Miranda y fuéramos a otro partido, tendríamos las mismas ganas de ganar. No creo que afecte una cosa u otra. Más allá de tener que poner todo de nuestra parte. Somos un equipo diferente a aquel, evolucionó para adaptarse a esas situaciones de incomodidad. Más allá del resultado, el reto que supone el partido".
Laterales: "El estilo va más allá de un jugador u otro. Pero con las cualidades es nuestra obligación potenciar las cosas buenas y tratar de cubrir las situaciones que no son tan facilitadoras. Estamos en eso. A veces cambiando posicionamientos, pero creo que la manera de jugar, el estilo, es el mismo. A veces es ver quién hace una función u otra en un equipo que quiere tener el balón, quiere descubrir espacios… tratamos de que sus relaciones sean las óptimas. Hay ciertos cambios, ciertos movimientos, pero el estilo no cambia nada".
Obrador: "Sigue el proceso de incorporarse al grupo, adaptando sesiones… ayer tuvo muy buenas sensaciones y es probable que planteemos la opción de que esté al 100 %. Somos optimistas, pero hay que esperar. Este proceso de ir incorporándose progresivamente le dejó buenas sensaciones. Esperamos corroborarlas hoy y mañana".
Barcia: "Es un chico tranquilo en general. Después de ese primer momento un poco duro de saber que la temporada termina por una lesión, con la resignación de saberlo, ya está pensando en trabajar. Tenemos unos profesionales espectaculares para trabajar con los futbolistas cuando están lesionados. Ya trabajando en mejorar otras cosas que cuando estás jugando semana tras semana, es más difícil".
Jaime, clave pese a jugar poco: "Lo explicó Pablo Vázquez perfectamente. Pocos jugadores en el equipo tan importantes como Jaime. Todo el mundo quiere jugar, él también. No está teniendo esos minutos, pero pocos tan importantes. Además es un gran futbolista que no está teniendo muchos minutos, pero eso pasa también con el resto. Hay jugadores que rinden a muy buen nivel durante la semana y luego no juegan, porque hay otros compañeros que también están en buen momento. Pero el funcionamiento del equipo está en que faltan dos laterales y un central, y salen tres jugadores con menos minutos y rinden a buen nivel. Siempre intento reflexionar con ellos. Es buena señal que el entrenador sea injusto con los que no juegan. Están haciendo un buen trabajo, pero también lo están haciendo los que están por delante. Cuando un equipo funciona bien, los que no están jugando también están bien. Porque ponen el listón muy alto durante la semana. Me satisface mucho cuando eso pasa".
Su futuro: "Mi situación ahora mismo es que estoy totalmente centrado en el partido de Anduva. Si quiero transmitir y transmito la importancia de estar centrado en un partido complicado, lo menos importante es cómo estoy yo o cómo me siento yo. Sabiendo además que en el grupo hay más gente que no tiene el futuro resuelto. Por delante tiene que estar lo colectivo y lo demás ya se irá haciendo".
Charla con Escotet: "Si hubo charla con mesa y mantel, son charlas privadas. Lo que se nos pide desde el club es dar el máximo. Cada vez ser mejores, que el equipo vaya creciendo en todos los aspectos. Para mí es muy importante construir algo que vaya más allá de ser capaces de ganar un partido y otro. La consecuencia de eso será ganar partidos. Tenemos que construir un equipo fuerte y llegar al máximo. El club pide ese máximo. Que el equipo trabaje, que progrese siempre, porque la idea de este club es ir a más y no quedarse aquí".