El domingo 2 de marzo se reeditará un duelo clásico del fútbol norteño entre Oviedo y Deportivo; dos equipos que hasta la fecha se han visto las caras en 98 ocasiones en partido oficial, por lo que se encuentran solo a dos citas de convertirse en rivales centenarios.

La Primera División (44), la Segunda (43), la Copa del Rey (9) y la Copa de la Liga de Segunda División (2) han emparejado a estos dos conjuntos históricos, que tras sus hondos baches recientes dirimirán un pulso en la categoría de plata, con los del Tartiere pugnando por el ascenso directo y los de Riazor en plena batalla por abandonar la zona media-baja de la clasificación.
 

En el cómputo global de los enfrentamientos entre ambos, los deportivistas presentan mejores números, con un total de 41 victorias, 32 empates y tan solo 25 derrotas, con una hoja de servicios adornada por 154 tantos a favor por 138 en contra.
 

En Segunda División, categoría en la que ambos comparten temporada, las estadísticas también sonríen a los herculinos, con 43 compromisos saldados con 16 triunfos, 15 igualadas y 12 derrotas, con 64 dianas a favor y 44 en contra.
 

La primera ocasión en la que blanquiazules y azulones se toparon en choque oficial acaeció en la temporada 1927-28 en la la fase de grupos de la Copa del Rey; concretamente el Deportivo lograba imponerse por 2-0 en el primer encuentro por 2-0 con tantos de Pereiro y Ramón, mientras que en la sexta contienda de este torneo los astures se tomaban cumplida venganza al endosarle al Depor un contundente 4-0, con dianas de Caramelero, Zabala (en dos ocasiones) y Rey en propia puerta.
 

A mediados de los años ochenta el Oviedo entró de pleno en la historia negra del Dépor, con un 1-0 en el Carlos Tartiere en la penúltima jornada de Liga 1985-86 que dejaba a los gallegos sin opciones de ascenso directo; en una contienda muy tensa, el defensa deportivista Silvi veía la tarjeta roja directa en el minuto 32, lo que obligaba a un sobreesfuerzo al bloque entrenado por Chuchi Aranguren, que acabaría tumbado merced a un polémico penalti transformado por Blanco en el minuto 72. La actuación del colegiado andaluz Villena Peña había dejado muy mal sabor de boca en el deportivismo.
 

Sin embargo, la explosión del Súper Dépor en los años noventa deparó a la grada blanquiazul episodios inolvidables en relación a los siempre intensos choques ante el cuadro del Principado.
 

No en vano, en la campaña 1993-94 el colectivo entrenado por Arsenio Iglesias hacía trizas a un Oviedo netamente inferior, con un más que elocuente 2-5 que dejaba a las claras la evidente diferencia de potencial entre ambos; en este encuentro anotaban para el Dépor Nando (2), Bebeto (2) y Claudio. A fin de temporada los herculinos concluían la Liga en segunda posición, igualados a puntos con el Barcelona, mientras que el Oviedo finalizaba noveno.
 

Otro nuevo festival deportivista tuvo como escenario el Nuevo Carlos Tartiere en el curso 2000-01 con la consecución de un 2-3 en la jornada 35ª de Liga, en un envite con connotaciones especiales para Diego Tristán, autor de un triplete, mientras que para los locales transformaban Jaime y Paunovic. El Deportivo concluiría de nuevo subcampeón de Liga (por detrás del Real Madrid), mientras que el Oviedo caería al pozo de Segunda y nunca más hasta la fecha volvería a actuar en la élite de Primera División.
 

Mucho más recientemente, en la categoría de plata, Oviedo y Dépor empataban 1-1 en el ejercicio 2018-19; con más de tres millares de fieles en las gradas del Tartiere el delantero panameño Bárcenas adelantaba al cuadro entrenado por Juan Antonio Anquela, mientras que Quique González en el minuto 53 establecía el resultado definitivo para un cuadro coruñés que acabó el año entre lágrimas por su derrota inesperada en Son Moix en la final del playoff de ascenso frente al Mallorca.
 

La última vez que ambos clubes calibraron sus fuerzas tuvo lugar en la campaña 2019-20, año deportivo marcado por la pandemia; en un feudo desierto como el Tartiere Oviedo y Deportivo sellaron un empate insuficiente para las pretensiones de salvación visitantes; Luismi y Bárcenas anotaban para los carbayones, mientras que Merino y Nolaskoain contrarrestaban.