El Deportivo desperdició ayer una ocasión inmejorable para situarse a dos puntos de los dos equipos que lideran la clasificación, el Racing de Ferrol y el Linares.
Ni los ferrolanos ni los andaluces pincharon el sábado. La escuadra racinguista goleó en Badajoz (0-3), mientras que los jiennenses se impusieron en Fuenlabrada (1-2). Dos resultados que permitían a ambas escuadras arrebatarle la cabeza del grupo al Córdoba, a la espera de lo que hiciera ayer el conjunto cordobés, que terminó sufriendo su primera derrota del curso.
Saltó la sorpresa en El Arcángel y el equipo de Germán Crespo cayó con un gol de Borja Martínez en el minuto 93. De esta forma, el Córdoba, que venía de protagonizar un arranque histórico con pleno de victorias en las cinco primeras jornadas, ahora es tercero en la tabla con 15 puntos, uno menos que el bloque de Cristóbal Parralo y el Linares.
Cuarto es el Alcorcón, que tras golear el sábado al Real Madrid Castilla (4-1) sube tres puestos y se mete de lleno en la pelea por el ascenso. Los madrileños lucen 11 puntos.
Con las mismas unidades aparece el Deportivo en la tabla, que cae a la quinta plaza, la última de las que permiten disputar el playoff de ascenso. Una victoria ayer contra el San Fernando habría permitido a la escuadra de Borja Jiménez colocarse a un solo punto del Córdoba y a dos del Racing de Ferrol y el Linares. Tres conjuntos que presentan su clara candidatura a lograr el ascenso directo.
La escuadra coruñesa está exhibiendo una preocupante debilidad defensiva en este arranque de temporada.
El Deportivo ha encajado goles en cinco de los seis encuentros que ha disputado hasta el momento.
Únicamente en la victoria en Mérida (0-1) el bloque blanquiazul fue capaz de mantener su portería a cero, habiendo recibido seis dianas en los otros cinco enfrentamientos: ganó 2-1 al Linense, empató (1-1) con el Pontevedra y el Celta B, venció 3-2 al Talavera y ayer cayó derrotado por el conjunto andaluz (0-1).
Los problemas blanquiazules no se reducen solo al área propia, ya que el Depor también está teniendo muchas dificultades para generar peligro y materializar sus ocasiones.
Si la pasada campaña destacó por ser un equipo con mucho gol, en el presente curso le está costando un mundo ver puerta. De hecho, ha marcado ocho dianas en seis encuentros, con una media de 1,33 por partido.
Los delanteros siguen sin estrenar su cuenta anotadora y Quiles ayer marcó una ocasión muy clara.