El entrenador de la SD Logroñés, próximo rival del Deportivo, aseguró que su equipo no va a pasearse mañana a Riazor y que irán a sumar de tres, tras romper la mala racha con su victoria contra el Tarazona (2-1).
“Me imagino ganar en Riazor, al final son tres puntos más, pero en un escenario como Riazor a cualquier entrenador y a todo jugador le gusta competir y ¿por qué no? La otra vez que fue allí, el club se llevó un punto con el gol de Ledo (en el curso 21-22) en el descuento ¿por qué no repetirlo o mejorarlo?”, se preguntó.
Para él la idea es clara “ir a ganar a todos los campos y luego se dará como se dará, pero la idea de actitud y mentalidad tiene que ser siempre de equipo ganador. Vamos a Riazor con esa mentalidad y queremos vencer en Riazor, esa es nuestra intención”, comentó.
Para él, en la situación en la que se encuentra el Depor, jugar en su feudo puede volverse en su contra, en función de cómo transcurra el partido. “El jugar en su casa con su gente puede ser un arma de doble filo para ellos, porque si nosotros sabemos gestionar el partido y a ellos no se les pone de cara... Del mismo modo que la gente o el ambiente en Riazor es un ambiente que no se da en otros campos de fútbol, si nosotros manejamos eso y el partido se nos pone de cara, a ellos les puede pesar y eso nos puede beneficiar. Saber jugar con eso también, con nuestras bazas”, aclaró, argumentando que “a nosotros, en particular, nos llega en un buen momento”, tras vencer al Tarazona. “Las sensaciones son positivas después de haber ganando al Tarazona. A nivel mental creo que al equipo le ha supuesto desbloquearse y romper esa mala dinámica” y tienen “confianza”.
Asimismo, considera que el Depor irá hacia arriba. “La categoría es muy difícil y a parte del Depor hay tres-cuatro equipos con mucha historia y peso que tienen su mismo objetivo. Pero no me cabe duda que al final de temporada van a estar arriba o más arriba de lo que están”, zanjó.