Óscar Gilsanz, entrenador del Fabril, compareció en rueda de prensa un día antes del debut en partido oficial esta temporada 2024-25 para analizar el estado de forma en el que llega su equipo al estreno frente al Real Ávila y la actualidad que rodea al filial del Dépor.
El entrenador betanceiro del Fabril empezó refiriéndose al trabajo previo a comenzar la liga. “Las sensaciones son buenas. Siempre que inicias una pretemporada tienes un recorrido largo para llegar a la competición, que es lo que realmente nos ilusiona a todos y por lo que todos trabajamos y nos dedicamos a esto. La semana en la que se inicia la competición siempre se intensifica el trabajo un poco más porque los propios jugadores se activan más y mejor. Las sensaciones son buenas con la idea de ser capaces de mostrar el trabajo realizado”, destaca.
Acerca de la importante cantidad de cambios que ha registrado el Fabril respecto a la pasada temporada, Gilsanz señala que “esto es algo cíclico y como filial que somos estamos preparados para estos cambios después de unos años con unas caras más reconocidas o que tuvieron mayor continuidad. Ahora nos toca iniciar otro ciclo diferente pero igual de ilusionante. Lo que debemos hacer nosotros es mejorar a los futbolistas, hacerlos cada día mejores, acercarlos cada vez más al primer equipo y tratar de trabajar lo máximo posible para que este ciclo sea también productivo para el club”.
El Fabril arranca la liga recibiendo al recién ascendido Real Ávila. “Es importante empezar la liga bien, con buenas sensaciones, con resultados que nos den confianza para que los chicos sigan trabajando. Nunca sabes si es mejor empezar fuera o en casa, pero lo que sí tenemos claro es que siempre nos gusta jugar como locales en Abegondo porque los jugadores se sienten cómodos. Trataremos de que, con nuestro trabajo y el trabajo del equipo, mostremos un buen nivel en casa y también fuera”.
Sobre el primer rival de la temporada, Gilsanz subraya que “después de ver al Ávila en algunos partidos de pretemporada sacamos la conclusión de que es un equipo muy fuerte físicamente, muy fuerte defensivamente, un equipo que la temporada pasada, la del ascenso de Tercera a Segunda Federación, encajaba muy pocos goles. Es un equipo histórico que vuelve a una categoría que es la que le corresponde y que va a entrar en la liga con mucha fuerza porque tiene buenos futbolistas y una idea clara de juego”.
Preguntado por el juvenil de primer año Pablo García, el míster del Dépor B dijo que “como todos los jugadores de la cantera que llegan y trabajan en el día a día con el primer equipo, Pablo está a disposición del club y cuando se crea conveniente no contar con él para las convocatorias del primer equipo, bajará a jugar, en principio, con el filial”.
Óscar Gilsanz comentó que “aspiro a que cuando empiece a rodar el balón veamos un equipo que sea capaz de jugar bien, sea capaz de competir, de adaptarse cuanto antes a la categoría. Tenemos muchos jugadores que vienen de Tercera, otros de categoría juvenil... Necesitaremos un tiempo de adaptación, pero la adaptación se consigue compitiendo, jugando bien, siendo un equipo que sea capaz tanto de atacar organizado como de darle velocidad al juego. A nivel defensivo debemos de ser contundentes en área propia. Hay mucho margen de mejora para los filiales y partimos con esa idea. Queremos sumar puntos porque eso nos va a dar confianza para que el trabajo sea mejor”.
Por último se refirió a que “estamos en un proceso en el que el buen trabajo que se ha hecho en Abegondo durante muchos años ha tenido una recompensa tanto en resultados como en proyección de jugadores al primer equipo. Esos huecos se ocupan con gente que sube del juvenil y del mercado. Dependiendo del momento acudes más o menos a traer jugadores que no se han formado en Abegondo”.