El Deportivo Abanca logró el pasado domingo su primera victoria de la temporada como visitante en Lezama, feudo del Athletic Club B (0-3). El resultado puede llevar a engaño porque se gestó en una acción clave en el minuto 11 en la que Lucía Alba García (Ponferrada, 1999) detuvo un penalti y allanó el camino del triunfo.

Es el cuarto partido oficial disputado como blanquiazul por Lucía, que en verano recaló en A Coruña procedente del Racing Féminas, y todavía se mantiene imbatida. La arquera, que admite que a este nivel nunca había podido acumular 360 minutos consecutivos sin encajar, se muestra encantada en su nuevo club y saca el lado positivo de las rotaciones que protagoniza con su compañera Yohana Gómez.

¿La primera victoria fuera os quitó un peso de encima?
Era como quitarse una nube que llevábamos puesta ahora. El partido se dio bastante bien, aunque sí que nos costó un poco entrar porque nos pitaron el penalti en el minuto 11 y se podía poner el partido en contra.  Pero al final conseguimos llevárnoslo nosotras.

¿El vestuario estaba especialmente aliviado?
Nos venía bastante bien porque, al ser la primera victoria fuera, te da un plus de confianza que no teníamos hasta ahora. Se veía que el equipo competía pero no llegaban los resultados. Con este +3 afrontas de otra manera los partidos de fuera de casa.

¿Qué explicación tiene el ‘hashtag’ #Delocotrones que utilizasteis en redes sociales?
Es un anécdota del viaje de vuelta, que si se nos da bien explicaremos más adelante (ríe). Yo creo que va a salir más de uno esta temporada si las cosas van así de bien. Este mismo igual se repite pero yo creo que va a ser más de un ‘hashtag’.
 

Este año ya me han tirado más penaltis que en los últimos tres

¿Qué recuerdas del penalti? 
Cuando te pitan un penalti en el minuto 11, parece que se complica todo y piensas ‘como nos marquen, se nos pone el partido en contra’. Pero entre la jugadora que lo tiraba, la intuición del momento y cómo iba el partido, tenía claro que me iba a tirar a la derecha. Los penaltis son un poco 50/50 y si tienes la suerte de adivinarlo... A mí me pasó, lo paré y tuvimos la suerte de seguir con la portería a cero.

¿Consideras que eres buena en ese aspecto del juego?
Este año se me han dado bastante bien pero es que este año ya me han tirado más penaltis que en los últimos tres y de momento va bastante bien. El Teresa Herrera, el Emma Cuevo, tuvimos varios torneos con tanda de penaltis.

Supongo que te hizo especial ilusión por seguir imbatida.
Me hace ilusión por la portería a cero pero sobre todo por lo que te dije. Si ya nos estaba costando ganar fuera, encajar un gol tan pronto... A nivel personal estoy contenta por seguir imbatida, pero sobre todo porque el equipo no decaiga en esas situaciones.

¿Te están llegando muchos mensajes de felicitación? 
Cuando las cosas van bien, todo el mundo te felicita y es de agradecer. La gente que apoya al Depor es muchísima y eso se nota dentro del campo en Abegondo y también cuando vas fuera.

¿Alguna vez habías estado cuatro partidos sin encajar?
Cuando era más pequeña, sí, pero desde que se creó Reto y ahora Primera RFEF, es la primera vez. Estoy bastante contenta por eso. También es verdad que el equipo defensivamente va muy bien y las defensas no dejan pasar casi balones. Así es un poco más fácil.

Las rotaciones te las puedes tomar de dos formas

¿Y cómo llevas el hecho de tener que rotar en la portería aunque tengas estas buenas sensaciones?
El año pasado también íbamos rotando en el Racing y te lo puedes tomar de dos formas. Yo prefiero tomármelo de la segunda. La primera es que al rotar no tienes mucha continuidad. Y la segunda es que de esta forma tienes a las dos porteras a su máximo nivel porque en cualquier momento puede jugar cualquiera de las dos. Yo es como prefiero verlo.

¿Cómo es Yohana como portera y también como compañera y competencia?
Es muy buena en los dos aspectos. Como portera es muy buena y además se nota los equipos de los que viene. Y nunca he tenido ningún problema con una compañera, así que también muy bien en ese aspecto. Intentamos ayudarnos en todo lo que podemos porque somos un equipo y si estamos las dos a nuestro máximo nivel, es lo que mejor puedes aportar para llevarte resultados.

¿Irene Ferreras ha hablado directamente con Yohana y contigo de las rotaciones?
No te puedo decir mucho sobre eso porque nosotras nunca sabemos lo que va a pasar. Nosotras entrenamos y la que mejor nivel esté en ese momento, será la que ponga Irene, pero específicamente de ese tema no se ha hablado en ningún momento.

Irene es una entrenadora intensa

¿Qué te parece Irene como entrenadora?
Me ha sorprendido muchísimo. Yo no había coincidido con ella. Me habían hablado muy bien de ella pero no la conocía. Sabía quién era pero no había coincidido. Me ha sorprendido mucho para bien. Me ha gustado su forma de ver el fútbol y sobre todo de transmitírnoslo. Es una entrenadora intensa. Cuando tienes claros unos objetivos, es lo mejor que te puede pasar.

¿Os pide algo específico a las porteras?
Lo que más se pide ahora a la portera es el juego con el pie y es en lo que más hincapié hacemos. El Depor es un equipo al que le gusta tener el balón y hacer limpia esa primera salida de balón te da muchísimo.

No queremos obsesionarnos, nuestros objetivos son a corto plazo.

¿Este Depor Abanca está capacitado para ascender?
Nosotras tenemos claro que hay equipo y vamos a intentar quedar lo más arriba posible. Sabemos que es una liga en la que todo el mundo se ha reforzado muchísimo y tenemos claro que no queremos obsesionarnos. Lo que vamos a hacer es intentar todo lo que esté en nuestra mano para merecerlo, pero al final de temporada veremos cómo queda la categoría. Nuestros objetivos son a corto plazo. Nos centramos en el siguiente partido y ya veremos dónde acabamos.

¿Qué significaría para ti llegar a jugar con el Depor Abanca en Primera?
Todavía es muy pronto porque ni siquiera sabemos cómo se va a dar la temporada, pero en el hipotético caso que consiguiéramos ascender, me encantaría. Ya no solo por jugar en Primera, sino por poder vivir el ascenso. Ya he tenido alguna experiencia previa y me parece algo inolvidable. Jugar en Primera División con tu equipo, con el que has crecido y ascendido, es una de las mejores cosas que te puede pasar.

Jugar en casa con todo el mundo apoyando es una pasada

El Eibar es uno de los favoritos al ascenso y el sábado visita Abegondo. Es de esos partidos que gusta jugar.
Es un tipo de partido que nos gusta a todas. Voy a hacer todo lo que pueda para intentar jugar, pero es Irene quien decide. Son esos partidos que nos gustan porque es un primero contra un segundo, el Eibar es a priori uno de los candidatos al ascenso, es un recién descendido de Primera y encima conoces a jugadoras del rival. Es un partido muy ilusionante.

¿Cómo se explica que el Depor haya arrasado en Abegondo hasta ahora?
Una de las claves es la afición. Es verdad que las instalaciones del campo siempre las tienen impolutas, trabaja mucha gente para que tengamos las mayores facilidades y, además, jugar en casa con todo el mundo apoyando y una grada que aprieta es una pasada. Las dimensiones que tiene el campo también nos ayudan muchísimo para nuestro estilo de juego, pero una de las cosas más importantes es lo que nos apoya la gente.

En el Depor te sientes futbolista profesional y vives por y para el fútbol

¿Qué balance haces de tus primeros meses en el Depor?
Estoy muy contenta. Me lo pintaban muy bien desde fuera pero verlo desde dentro es otra cosa. Todas las facilidades que nos dan las jugadoras, toda la gente que trabaja por y para nosotras... Es una pasada. La gente lo pinta muy bien pero cuando estás dentro te das cuenta de todo. Básicamente te sientes futbolista profesional y vives por y para el fútbol. Te dan todas las facilidades para ello.

¿Cómo se gestó tu fichaje?
A través de mi representante se llevó a cabo el fichaje y me llamó Rocío Candal. Fue la persona con la que hablé y la que me transmitió que el cuerpo técnico quería que formase parte del Depor Abanca. La verdad es que era una llamada que no me esperaba porque venía de un año en el que no había jugado mucho, pero vieron algo y yo, encantada (ríe).

¿Te lo pensaste mucho? ¿Hablaste con alguien para pedir referencias?
Hablé con gente por el tema del trato a jugadoras, que en el fútbol femenino es muy importante. Todo el mundo me hablaba muy bien y yo, después de haber jugado contra ellas el año anterior, vi que me podía encajar su estilo de juego. Entonces no tuve duda de que me quería venir al Depor.

¿Venir con Henar fue un factor importante?
Con Henar y Marta Charle ya había coincidido. De hecho, Henar es amiga mía. Pero fueron fichajes que se hicieron en  diferentes etapas y yo solo sabía que podía ser (sus fichajes) pero no era nada fijo. Yo lo único que tenía fijo es que yo había firmado y de ellas no tenía ni idea.

A Coruña es una ciudad donde se respira fútbol y eso me encanta

¿Qué tal en A Coruña?
Espero que no me mate la gente pero me parece bastante parecido a Santander por la forma de vivir, la playa y demás. El norte me gusta mucho y estoy muy contenta en Coruña. Además, la gente apoya al Depor femenino. Vas por la calle y te cruzas dos, tres personas con la camiseta del Depor. Es una ciudad donde se respira fútbol y eso me encanta.

¿Compaginas el fútbol con estudios?
Sí, estoy estudiando un curso de auxiliar de fisio para saber si me gustaría meterme el próximo año en la carrera. Como es ‘online’ me permite tener facilidad de horarios con el fútbol, que para mí es la prioridad. 
 

Sus inicios como portera 

Lucía comparte ciertas similitudes con muchas porteras y porteros que no dieron sus primeros pasos en el fútbol bajo los palos. Cuenta que su pasión por el fútbol le viene por la parte materna de su familia y que pasó del lateral derecho al arco tras enamorarse de un entrenamiento de porteros.

¿De dónde te viene la pasión por el fútbol y cuándo empezaste a jugar?
Te diría que me viene de mi abuelo y de mi madre, que son bastante futboleros. A la mayoría de mi familia le gusta el fútbol pero no lo practicaba nadie. Me acuerdo de que siempre estaba puesto el fútbol en la tele en casa de mi abuelo. Entre eso y que mis amigos jugaban todos en el equipo del pueblo, al final decidí meterme... Bueno, decidieron meterme mis amigos en el equipo.

¿Comenzaste de portera o primero fuiste jugadora de campo?
Yo empecé de lateral derecho en mi primera temporada. Al ser chica no había vestuarios diferenciados y me tocaba vestirme antes o después que mis compañeros. Dio la casualidad de que las porterías estaban enfrente de los vestuarios y un día que me quedé esperando a que se cambiaran, estaban entrenando los porteros mayores. Me encantó verlos, ahí me enamoré. Le dije a mi madre ‘quiero ser portera’. Acabé esa temporada de lateral derecho y mi madre no me quería dejar por el miedo que tienen todas a que te marquen muchos goles y a llevar las culpas, aunque no quería que lo dejase. A raíz de eso, yo en el patio siempre me ponía de portera y un día en el equipo faltó mi compañero, el que era portero. A mí me daba mucha vergüenza decirlo pero como todos ya sabían que me gustaba, me tuve que poner medio obligada en ese partido,. A partir de ahí ya dije ‘me quedo aquí’.
 

De jugadora de campo no sé yo el futuro que tendría

¿Echas de menos jugar como jugadora de campo?
No. Elegí bastante bien porque de jugadora de campo no sé yo el futuro que tendría (ríe). Estoy muy cómoda en mi posición.

¿Cuáles consideras que son tus fortalezas como portera?
El juego con el pie creo que es bastante diferencial y en velocidad de reacción y reflejos a corta distancia creo que no voy mal. Entre eso y el uno para uno, creo que son mis puntos fuertes.

¿Y cuáles crees que son tus puntos débiles? ¿Qué puedes mejorar?
Tanto yo como la mayoría de porteras de femenino, el juego aéreo. Aparte de que es lo más complicado, a las chicas nos suele costar un poco más. Si tuviese que decir algo que puedo mejorar, que de hecho lo estamos trabajando, sería el juego aéreo.