Tenía el Deportivo la oportunidad de dar un paso de gigante hacia la permanencia. Sin embargo, el equipo de Fran Alonso se marchó de Buñol de vacío, cediendo al Levante tres puntos que les sirven para adelantarlo en la clasificación.
El parón internacional permitió al Deportivo explorar un nuevo sistema que ejecutó en la pasada jornada ante el Levante Badalona. Lo cierto es que el plan salió a la perfección y el 4-2-3-1 dio la victoria al conjunto dirigido por Fran Alonso. Pero esta vez, ante el Levante, el técnico madrileño regresó a la defensa de cinco. Acompañando a las centrales estuvo Paula Novo, que volvió a demostrar valía y personalidad. Sin embargo, el equipo no terminó de asentarse y se mostró incapaz de dominar con claridad cerca del área rival como sí lo hizo ante el Levante Badalona en Riazor.
Todo lo que sea alejar los fantasmas del pasado será bueno para acercar la permanencia. Pero en Buñol el Deportivo volvió a desperdiciar ocasiones claras. No lo hizo así el Levante, que aprovechó las suyas para castigar al conjunto blanquiazul. Poco después del gol de Bárbara que supuso el empate, Samara tuvo la oportunidad de poner al Dépor por delante, pero su disparo se marchó alto; justo antes de llegar al descanso, Millene estrelló el balón en el larguero en la más clara del partido. Dos ocasiones que las deportivistas terminaron lamentando más de lo esperado.
Fue en el minuto 49 cuando el Levante se puso por delante en el electrónico. Polémicas aparte, el gol obligó a reaccionar a las blanquiazules, que se volcaron en ataque ante un Levante replegado en su propia área, intentando reducir al mínimo los huecos. Y ahí el Deportivo se quedó sin ideas. A pesar de ello, no fue hasta el minuto 74 cuando Fran Alonso tiró del banquillo. Dio entrada a Bennett, que se chocó una y otra vez con la zaga granota. Ya sin apenas tiempo, el técnico madrileño hizo tres cambios de una sentada: Elena, Eva Dios y ADT, aunque la escasez de minutos y la falta de un plan estable les privó de ayudar al equipo.
Fueron varias las jugadoras del Deportivo que, en cuanto el disparo de Carbonell cruzó la línea de meta, reclamaron el fuera de juego posicional de Ana Franco. Sin éxito, pues ni Trujillano Gallardo ni su asistente lo consideraron así. Inês se llevó la amarilla —la quinta— y un gol en contra que pone al equipo blanquiazul contra las cuerdas. Un error arbitral que, horas más tarde, se hizo más evidente en el partido entre Villarreal y Real Sociedad, en el que Cuadra Fernández anuló un tanto a los groguets por una acción idéntica.