Ana Valles Camisella (Gijón, 15 de agosto de 1997) es la portera del Deportivo Abanca en este buen inicio de liga en Reto Iberdrola. Dos victorias en dos partidos y un único tanto encajado avalan el arranque de campeonato de la guardameta que llegó este verano procedente del Pozuelo de Alarcón.
Internacional con la sub-16 y convocada por la selección absoluta, Ana Valles cuenta con experiencia en Primera División con el Rayo Vallecano y el Tacón. Compagina el fútbol con las prácticas de un Máster de Abogacía y este sábado se reencontrará con el club de su ciudad, el Sporting de Gijón, donde jugó durante dos años. Un partido especial para la nueva guardiana del Depor.
¿Ya tienes ganas de volver a competir después del parón?
Los parones vienen bien para desconectar y olvidarte un poco de la realidad pero mi trabajo es ser futbolista y lo que me llena es la competición.
¿Cómo está el vestuario después de las dos victorias en las dos primeras jornadas?
Siempre es bueno comenzar ganando, las jugadoras tienen un plus más de confianza. Veo al grupo comprometido y con la idea de juego más clara y asentada. Según vayan pasando las jornadas el equipo llegará a mostrar un fútbol verdaderamente bueno y estamos trabajando hacia ese objetivo que quiere el entrenador de lograr el dominio total del partido.
Varias jugadoras han destacado el buen ambiente del vestuario. ¿Por qué crees que estáis logrando eso?
No sé la razón de este sentimiento tan familiar porque es cierto que cada una venimos de un sitio diferente. En primer lugar, hay que destacar la acogida que tenemos. El club nos ha puesto a nuestra disposición a una persona, que es América, para ayudarnos en todo lo relativo a nuestra estancia, a caer de pie en Coruña. Es el primer paso para que te sientas a gusto. El Depor nos los ha puesto muy fácil. Y después se ha juntado un grupo de gente que viene en busca de segundas oportunidades, en busca de hacerlo bien. Hay muchas jugadoras de Primera que vemos que este es un proyecto ilusionante para intentar ascender. Y esa mezcla de diferentes personalidades ha formado un grupo verdaderamente espectacular.
¿Puedes contar alguna anécdota que refleje ese buen ambiente?
Nosotras hacemos como un ritual alrededor del entrenamiento fomentado por Miguel (Llorente). Tanto al principio como al final de los entrenamientos hacemos un círculo en el mediocampo. Ese círculo tiene que estar bien cerrado para que no se vayan las malas energías entre nosotras y siempre hacemos alguna que otra broma al empezar y al acabar. En el vestuario también solemos poner música y se trata de que al final vamos todas juntas y el equipo funciona con armonía. Miguel no es el que manda, sino que nosotras, a través de la comunicación, también podemos decidir cambios en los días libres, horarios de entrenamientos... Nos hemos desligado un poco de la figura de que el entrenador es quien manda y las jugadoras son quienes reciben las órdenes. Miguel ha sido la persona que ha decidido esto y creo que las jugadoras estamos respondiendo muy bien.
Las facilidades que te da el club están al alcance de pocos, aquí te sientes profesional
Ya llevas dos meses en el Depor. ¿Qué te parece el club?
Aquí te sientes una jugadora profesional. El tema del las instalaciones, el trato que recibes, entrenar en natural, la disponibilidad que nos ofrecen en pleno COVID de poder tener dos vestuarios... Todas las facilidades que te ofrece el club están al alcance de pocos. He tenido la posibilidad de entrenar en equipos grandes y entrenar en Valdebebas y ya te digo que el Deportivo, a pesar de ser un equipo humilde de una ciudad pequeña, hace que las jugadoras nos sintamos en casa. Además, hace que sientas que estás haciendo tu trabajo rodeada de las mejores personas porque tratan a tu deporte de manera profesionalizada. Y eso dentro del fútbol femenino se agradece mucho.
¿Qué pensaste sobre el nivel de la plantilla a medida que se iban confirmando las piezas?
Un poco lo que pensaba todo el mundo. Un día aparecía un fichaje y decías ‘esta jugadora es potente’. Y de repente venía otra y otra. Jugadoras con nombre y con experiencia en Primera División. Creo que es un equipo muy combinativo en el sentido de que combinas esa experiencia de jugadoras de Primera y luego tienes muchas niñas promesa. Gente de 20-22 años que al final sale de canteras fuertes, que ha tenido años en Primera, que intenta buscarse un hueco en la élite y viene a caer aquí a Coruña. Cuando ves la calidad individual de cada una dices ‘con esta calidad individual tenemos que intentar hacer algo muy grande a nivel colectivo’.
¿Por qué elegiste venir al Depor? ¿Tenías otras ofertas?
Tenía varias ofertas pero al final el Deportivo siempre ha sido un equipo que me ha llamado la atención. Desde el año que subieron a Primera las seguía mucho y siempre me he ligado más a equipos sufridores que están intentando mantener la categoría. Venía de jugar en Primera con el Rayo Vallecano, venía de saber lo que cuesta mantener la categoría y empatizas con esos clubes. Además, soy asturiana y estoy cerca de casa. Así que se dio todo para que cayese aquí en Coruña y estoy muy contenta.
¿Qué pensaste cuando el club anunció los despidos de Manu Sánchez y Pablo Pereiro?
Nos pilló a todas un poco de sopetón. Las jugadoras pudimos hablar con Pablo, despedirnos y demás, pero personalmente no lo conocía y es una decisión que no nos incumbe a las jugadoras. Es una decisión de la directiva y poco podíamos hacer. Nos tocaba adaptarnos a la nueva situación y creo que las jugadoras hemos cumplido.
¿Cómo es Miguel Llorente como entrenador?
Es un entrenador al que le gustan las cosas bien hechas. Es exigente en cuanto a que en el entrenamiento haya intensidad, pero luego es una persona muy cercana. Además es joven y empatiza con la jugadora, no solo como futbolista sino como persona. Tiene en cuenta al colectivo, es cercano, risueño e intenta quitarle peso a cualquier tipo de problema que pueda surgir en el vestuario. Aparte de ser un buen entrenador, es un buen gestor de grupo.
¿Qué os pide a las porteras?
Nos pide que seamos valientes, que nos atrevamos a jugar adelantadas y nos dice que somos una más. Hace mucho hincapié en el juego con el pie y él no tiene en cuenta las posiciones en el campo. Y eso que la portera es la más posicional pero él no habla de posiciones. A él le parece estupendo que la mediocentro se meta de lateral y que todo sea coordinativo. Y en esa misma idea nos quiere meter a nosotras. Quiere que juguemos adelantadas y que le demos continuidad al juego con el pie. Gran parte del entrenamiento lo hacemos como jugadoras.
¿Te sientes cómoda con esta idea de juego?
Personalmente sí. Me siento cómoda jugando adelantada. Soy más de salir a cortar que de esperar el uno contra uno. Me siento más cómoda jugando más adelante, jugando con el equipo. Eso tiene el riesgo de que una pérdida en salida de balón te puede pillar desubicada, pero es un juego que da más ventajas que otra cosa.
Jugaste el pasado curso en Reto. ¿Qué rivales y partidos se va a encontrar el Depor?
Creo que el grupo Norte es un pelín más fuerte que el Sur. Tenemos muchos equipos fuertes. Los que han bajado de Primera apunta alto y Osasuna, Racing y Levante Las Planas se han reforzado mucho. Nos vamos a encontrar en los primeros 45 minutos equipos físicamente fuertes que nos van a venir a apretar arriba y que nos van a poner en complicación. Si somos capaces de jugar rápido, de atraerlas y mirar lejos y, en definitiva, hacer nuestro fútbol, se nos van a poner de cara un poco más los partidos.
Tienes claro que os van a presionar en vez de esperar.
Lo tenemos claro y entrenamos para que nos vengan a apretar. Miguel nos insiste en que según vayan pasando las semanas nuestra velocidad tiene que ser mayor. Porque van a venir a cuchillo. Tenemos la ventaja de que queremos el balón y quien tiene el balón es quien decide sobre el juego.
Te llama más el proyecto de ascender que lo que haya en portería
Una lesión impidió que María Sampalo, portera del Deportivo, entrase en las convocatorias de los dos primeros partidos de liga. La gaditana y Ana Valles competirán durante la temporada por un puesto en la portería blanquiazul.
¿Cómo es la relación con María Sampalo, tu compañera en la portería?
Hay mucha competitividad en la relación en portería y además Fran (entrenador de porteras) es lo que quiere. Buscaba dos porteras muy competitivas que tuvieran que disputar el puesto. Pero fuera de la competitividad lógica, nos llevamos muy bien. Lo principal es disfrutar del deporte y entre broma y broma que nos gastamos se nota que hay buen ambiente. Obviamente las dos queremos jugar. Ella ahora mismo está saliendo de una lesión y cuando una jugadora se lesiona, y más cuando es tu compañera de portería, afecta a todo el grupo ya que la competitividad no es la misma. Cuando volvió yo le decía ‘ya te echaba de menos’. Ya necesitaba a alguien que me apriete las tuercas. Va a haber una competitividad sana y tienes que pensar que la decisión de jugar o no jugar depende del entrenador. Dentro de lo traicionera que es la portería, porque una juega y otra no, creo que la competitividad va a hacer que las dos vayamos a tener minutos.
Decidiste fichar por el Depor a pesar de que ya sabías que la competencia iba a ser feroz porque sois dos porteras con experiencia en Primera e internacionales.
Sé que Sampalo es una portera con nombre pero ya estuve compartiendo portería con la grandiosa Alicia en el Rayo. En el tema de ganarte o no el puesto me parece primordial que haya esa competitividad que ayuda a que el rendimiento sea superior. He aprendido a lidiar con un banquillo. No es lo mismo venir sin que nunca te hayan dicho que no. Pero llegas al Rayo con una gran portera y se aprende mucho desde el banquillo. Además, la liga es muy larga y la competencia es lo último en lo que pensé. Me gustaba el equipo y pensé que podía ser una bonita experiencia. Te llama más el proyecto de ascender que lo que haya en portería.
Gijón y Coruña son parecidas, aquí me siento como en casa
Ana Valles es natural de Gijón, jugó en el Sporting durante dos temporadas y el sábado se enfrentará a su exequipo en Abegondo. La portera recuerda su paso por el club asturiano y compara A Coruña y Gijón.
El sábado recibes al club de tu ciudad y uno de tus exequipos. ¿Es un partido especial?
Sí. Es un partido especial porque es el equipo de mi ciudad. Estuve dos años jugando en Nacional en el Sporting y le tengo mucho cariño al club y a las personas que siguen trabajando allí y me dieron la oportunidad de empezar en el fútbol femenino. Apostaron por mí cuando era muy jovencita y mis primeros recuerdos en el fútbol femenino fueron con ese escudo. Siempre es bonito reencontrarse con esos equipos.
¿Queda alguien de tu etapa allí?
Queda sobre todo personal del club. Tengo el recuerdo de Chus, el entrenador de porteras, de Jandro, que anda por la directiva, Juan Luna... Son nombres que siguen trabajando allí y siguen incentivando el fútbol femenino. Si llevan más de diez años dentro del fútbol femenino es que tienen devoción por él. Les guardo cariño por todo lo que están haciendo por el fútbol femenino.
¿Has recibido algún mensaje o esperas algún mensaje de familiares o amigos?
Para mí es una rivalidad sana. El eterno rival del Depor es el Celta pero si me apuras el segundo es el Real Sporting. Hay una rivalidad, es evidente. Mi familia sabe que soy muy profesional, que el Sporting será siempre el equipo de mi corazón, pero ahora mismo estoy en el Depor y no me voy a dejar aconsejar. Ni mucho menos. Ese partido lo quiera ganar como la que más. Eso sí, ni mis padres ni mis abuelos, que tienen un poco el corazón dividido, me han dicho nada pero igual ellos con un empate se conformaban (risas). Pero bueno, nosotras tenemos un objetivo que son los tres puntos. Le deseo lo mejor al Sporting pero este fin de semana los tres puntos se van a quedar en Abegondo.
¿Qué peligros tiene el Sporting y por dónde se le puede hacer daño?
El cuerpo técnico nos ha dicho que físicamente están muy bien, que son el cuarto equipo más joven de la liga y que son chicas muy intensas. Quizá pueden pecar un poco de juventud y tenemos que saber aprovecharlo pero va a ser un equipo intenso.
Siempre se ha dicho que A Coruña y Gijón son ciudades parecidas. ¿Lo sientes así?
Llevo poco tiempo pero sí que son ciudades muy parecidas. Además, las dos son del Norte y el clima es prácticamente igual. En un sitio tomas Albariño y en el otro tomas sidra. Y pasas de pulpo a cachopo. Si vas a Asturias prácticamente comes la misma gastronomía que en Galicia y viceversa. Aquí me siento como en casa.