La localidad malagueña de Antequera se convirtió por segunda vez en la sede del campeonato de España absoluto de pista cubierta. 

La primera edición fue en el año 2015. Esa fecha quedaría marcada a fuego al atleta coruñés Mauro Triana. Había entrado en la historia del atletismo gallego al conseguir su primera medalla en un campeonato de España absoluto, con su bronce en los 200 lisos y batiendo el legendario récord de Isidoro Hornillos, que tenía una antigüedad de 33 años con una marca de 21.69. Pero una semana antes se había proclamado en la misma sede campeón de España sub-23, también en el doble hectómetro, por lo que con esos antecedentes no era de extrañar que Mauro Triana la volviera a ‘liar’ en tierras malagueñas.

El tartán de Antequera se iba a convertir en juez para muchos atletas que apuraban sus últimas opciones para conseguir la mínima para el europeo de Glasgow. Algunos lograron que Antequera, ciudad del deporte por eslogan, consiguieran que esta localidad fuera su particular Teatro de los Sueños en esta ocasión, cara o cruz para muchos y muchas. 

Pero en lo concerniente a la expedición coruñesa había dos claros referentes donde estaban puestas todas las miradas y todas las ilusiones. Por un lado, el propio Mauro Triana y por lo otro, la reciente campeona de España sub-23 y recordwoman gallega de 400 Paula Iglesias. No serían los únicos atletas coruñeses presentes en la máxima cita nacional indoor, ya que Sergio Rodríguez Teixeira tomaría parte en los 200 lisos, mientras que Antía Martínez Queimaño y Teresa Rodríguez serían de la partida en los 60 metros vallas.

Los primeros
Los primeros en saltar a la pista fueron los atletas del doble hectómetro. Los caprichos del sorteo de las series hizo que hubiera un duelo fratricida, con los compañeros de entrenamiento Mauro Triana y Sergio Rodríguez en la misma eliminatoria. Este último no tuvo suerte con la calle. Salió por la 3, que penaliza mucho en pista cubierta, acabando con un crono de 22.10, insuficiente para acceder a las semifinales. Por su parte, Mauro Triana pasaría de forma directa a semifinales al lograr la victoria con un crono de 21.54, cerca de su récord gallego absoluto de 21.45.

Después le tocó una semifinal dura, ya que el gran favorito para el oro, Dani Rodríguez, ganaría su eliminatoria. Pero su tiempo de 21.61 le condenó a la calle 3, mientras que Triana correría por la 6, que junto con la 5 marcan la diferencia en esta prueba.

Gran marca
Los dos se lanzaron a tumba abierta para, primero, lograr el pase a la final y, segundo ,para coger las calles buenas en la lucha por las medallas. La carrera fue de poder a poder con un Dani Rodríguez colosal y con un Mauro Triana esplendoroso, todo fuerza y potencia, que lo llevarían a pulverizar su propio récord gallego con una sensacional marca de 21.28, ganando el coruñés la semifinal. En la final sus rivales serían el propio Dani Rodríguez, junto al catalán Oriol Madí y el sevillano Alberto Salcedo.

En la primera de ellas, Dani Rodríguez no dio opción ninguna a la sorpresa. Su crono de 21.08 sentenciaba la medalla de oro, el sevillano Alberto Salcedo marcaría 21.51, referencia para los integrantes de la otra final, con Mauro Triana y el catalán Oriol Madí peleando por las medallas.

El coruñés se mostró intratable y en una gran carrera se fue hacia la medalla de plata con un crono de 21.30, a escasas dos centésimas del récord que había conseguido el día antes. Por su parte, Oriol Madí se colgaría la medalla de bronce con un crono de 21.39.

Paula Iglesias llegaba con el aval de su reciente medalla de oro en el 400 del campeonato de España sub-23 en Salamanca, donde estableció una nueva plusmarca gallega.

Llegaba con la intención de meterse en su primera final absoluta y una vez en ella luchar por las medallas. Logró la victoria en su semifinal con solvencia con un crono de 54.90, dejándose algo de cara a la final, donde la lucha a cara de perro por entrar primera en la calle libre iba a ser épica. A priori, dos grandes favoritas, por un lado Auri Bokesa, que se dejó sorprender en la semifinal por la jovencísima Salma Paralluelo, que con su marca de 54.10 batía el récord de España sub-18, a sólo dos centésimas del sub-20, y por otro la intratable Laura Bueno, inaccesible para todas. Está a otro nivel la granadina.

La final tuvo el guion esperado. Laura Bueno accedía de primera en la calle libre con una Auri Bokesa que entraría segunda a pesar de ir por la 1. Detrás de Bokesa la sorprendente Salma Paralluelo, que le pelearía la medalla de plata hasta el final. 

Entró a sólo dos centésimas de Bokesa, 53.81 por 53.83, por los intratables 53.08 de Laura Bueno. 
Paula Iglesias intentó entrar en carrera, siempre detrás de las tres favoritas. En la recta final parecía que podía pelear por el podio, pero no logró entrar en la lucha definitiva, acabando sin embargo con unos muy buenos 54.51.

En las vallas, sensacional actuación de Antía Martínez. Su registro de 8.94 le suponen su mejor marca personal, pero insuficientes para pasar el corte para acceder a semifinales. Por su parte, Teresa Rodríguez lograría un crono de 9.12.