El esloveno Tadej Pogacar (UAE Emirates) sigue aumentando su reinado en las Ardenas con un triunfo contundente en la 87 edición de la Flecha Valona disputada con un recorrido de 194,3 km entre Herve y el Muro de Huy, en la que el español Mikel Landa subió al podio como tercer clasificado.
Se cumplió el pronostico con un Pogacar (Komenda, 24 años) intratable, en racha, dispuesto a firmar el triplete el próximo domingo en la Lieja Bastoña. En el Muro de Huy el doble ganador del Tour subió como nadie, sin apenas ponerse de pie, y ganó claramente su primera Flecha Valona, la única que le faltaba de las clásicas ardenesas.
El rey Pogacar, con 12 victorias esta temporada, disparó los brazos al cielo en la cima de Huy con un tiempo de 4h.27,53, a una media de 43,5 km/hora. Sus rivales cruzaron con el mismo tiempo, a unos metros, con el danés Mattias Skjelmose (Trek) y Mikel Landa (Bahrain) a continuación.
Otro podio para el ciclismo español en una llegada donde se han coronado Alejandro Valverde cinco veces, y una Igor Astarloa, Purito Rodríguez y Dani Moreno.
"Muy feliz con el tercer puesto, pero lo de ganar a Pogacar es otra cosa, está a otro nivel y además su equipo ha controlado muy bien en todo momento. El domingo la presencia de Evenepoel puede cambiar las cosas, y en la disputa con Pogacar se puede sacar provecho", dijo el alavés en meta.
De salida se formó una fuga de 8 corredores con presencia del madrileño Raúl García Pierna (Kern Pharma) y un representante del Burgos BH, Jetse Bol, además de Hindsgaul (Uno-X), Impey (Israel), Zimmermann (Intermarche), Soren Kragh Andersen (Alpecin) y Meens (Bingoal).
La Flecha Valona tiene su guión habitual, y se cumplió al pie de la letra. Todo sucede y se decide en los 1.300 metros de subida al Muro de Huy con su porcentaje medio del 9 por ciento y rampas finales del 15. A la fuga inicial se unieron Battistella y el belga Vervake (Soudal).
Con el UAE controlando todo el día con la misión única de escoltar a Pogacar hasta la gloria, el pelotón echó abajo la aventura a 5,3 km de meta, aunque se rebeló Vervaeke unos kilómetros más, hasta que se le vino el Muro encima.
Empezó la carrera de verdad, con los favoritos a escena. El primero en lanzar un ataque fue Bardet, pero Pogacar, atento, apenas se inmutó, siguió su ritmo, inaguantable para todos sus rivales. Pidcock lo intentó por un lado de la estrecha carretera de la Calle de las Capillas, así como Skjelmose.
No hubo manera de desbancar a Pogacar, quien aceleró a 100 metros de la llegada sin la menor respuesta de sus enemigos, resignados a luchar por el segundo puesto.
Miró atrás Pogacar, tenía unoD metros de ventaja y alzó los brazos. Los difícil lo hizo fácil. Después del Tour de Flandes y Amstel, la Flecha. Ahora a pensar en la Lieja, que ya la tiene en su palmarés. La historia le espera en "La Decana".
El esloveno Tadej Pogacar (UAE Emirates) declaró, tras la conquista de su primera Flecha Valona, que "nunca se aburre de llegar el primero" y destacó que lo tuvo que "dar todo" en el ascenso a Huy para concretar el trabajo de su equipo durante toda la carrera".
Nunca te aburres si cruzas la línea el primero. Realmente lo disfruto y estoy agradecido de tener en este momento una forma tan buena
"Nunca te aburres si cruzas la línea el primero. Realmente lo disfruto y estoy agradecido de tener en este momento una forma tan buena. Disfrutaré este momento mientras pueda. ¿La Lieja del domingo? Es una carrera diferente con subidas más largas", dijo en meta el ganador de Tour de Flandes, Amstel y Flecha.
Pogacar explicó que se tuvo que emplear a fondo en un final muy agitado, con muchos ataques, entre otras cosas para evitar que el trabajo de todo su equipo hubiera sido estéril.
Lo dí todo en la subida, fue muy dura. Es un final espectacular, ¿qué puedo decir? Siento mucha confianza cuando el equipo hace un trabajo tan increíble
"Lo dí todo en la subida, fue muy dura. Es un final espectacular, ¿qué puedo decir? Siento mucha confianza cuando el equipo hace un trabajo tan increíble. Algunas veces veía a los compañeros frente a mí y pensaba que si no ganaba todo el trabajo sería en vano. Cuando faltaban 20 km, o incluso 50k, estaba muy nervioso, pero el equipo hizo un gran trabajo manteniéndome al frente", comentó.
Pogacar recalcó que ningún equipo ayudó al Emirates en toda la carrera, salvo el Ineos en algunos momentos.
"Nadie nos ayudó realmente. Ineos un poco, pero no demasiado. Todo dependía de nosotros. Al final, queríamos hacer una carrera aún más difícil, pero los muchachos estaban un poco cansados de tirar durante 200 km, pero aún así hicimos una carrera difícil, como habíamos planeado", concluyó.