El fútbol es un mal negocio. La lógica no tiene peso específico, así que todo depende de que la pelotita entre o no al fondo de una portería. Puedes dar pena jugando, pero si tienes gol, no importa. Lo que da puntos, lo que consigue que escales posiciones y alcances objetivos en la competición es que el balón entre.
Tuvimos claros ejemplos en la primera vuelta del Depor. El equipo jugaba realmente mal, pero ahí estaba alguien en los últimos minutos y la enchufaba. Punto y pelota. Borja Jiménez y sus futbolistas deberían entender que no se les exige, nunca se hizo, que hagan un ‘jogo bonito’. Todo lo contrario, da igual la forma, lo que importa es ganar y sumar puntos. Ya sabemos que no se les puede pedir fútbol. ¿Quién en esta categoría lo tiene? Nadie, no hay un equipo que sea superior a los demás.
Así que bueno sería que el técnico y sus jugadores asumieran la realidad. Hacer todo lo que puedan para ganar los partidos que restan, y para ello será necesario ponerse el mono de trabajo. El buen fútbol ya sabemos que no.