Dos viejos conocidos de Preferente, Victoria y San Tirso, buscan esta tarde-noche (Riazor, 20.30 horas) hacerse con la LXXXI edición de la Copa de A Coruña, uno de los trofeos más preciados del fútbol aficionado gallego. Para las ‘cebras’ sería su segundo entorchado, tan solo un año después de estrenar su palmarés en esta competición; mientras que el equipo de Mabegondo quiere levantar por tercera vez un título que fue a parar a sus vitrinas en 1981 y 2019.

El Victoria no podrá contar con el central Xosé, por lesión, ni tampoco con dos hombres que ya disputarón la presente edición de este torneo con su anterior equipo. Es el caso del lateral derecho Aritz Zabala, que jugó con el Torre, y de Joaquín Block, delantero que entró bastante en los planes de Miguel Taibo tras llegar procedente del Atlético Arteixo B. En el apartado de altas, un Nano Varela que arriesgará tras su rotura del radio y será el encargado de llevar la manija en el centro del campo.

Ha sido un curso complicado para los herculinos -descendieron a Primera Galicia-, pero en la competición del K.O han encontrado una oportunidad para cerrar el año con mucho mejor sabor. Tras derrotar a Atlético Cercedense, Teixeiro (por penaltis), Sada, Órdenes y Club do Mar, llegan al partido decisivo en Riazor con el objetivo de firmar la redención. 

El técnico, Miguel Taibo, dio su punto de vista: “Espero un partido igualado y muy competido entre dos equipos que van a tener que adaptarse a las dimensiones del terreno de juego y del césped. A partir de ahí, debemos tener mucha personalidad con balón y evitar pérdidas innecesarias, ya que sabemos que ellos no las desaprovechan”.

Por su parte, el San Tirso solo tiene la baja del portero David Lameiro, lo que asegura la titularidad de Adri Suárez. El atacante Carlos Díaz entra finalmente en la lista, pero no se encuentra al cien por cien y todo hace indicar que Antón, Segade y Xian escoltarán en la mediapunta al punta Denis.

Los ‘verdes’ ven este partido como una oportunidad de coronar una temporada ya de por sí exitosa, con un cuarto puesto en el grupo Norte de Preferente, la mejor clasificación histórica del club. Su camino hasta la final, nada sencillo y con remontada tanto en cuartos como en semifinales, fue el siguiente: Torre (por penaltis), Atlético Castros, Visantoña, Crendes y Carral.

Su entrenador, Fabio Rodríguez, habla de “un par de alicientes importantes para pelear por ella y que sea la despedida de temporada ideal”. Entiende que “para muchos sería la primera Copa” -él incluido-, y que serviría “para despedir a Santi como Dios manda, que nunca la ganó”.

Para que el final sea el deseado, cree que deben “madurar el partido y no caer en la precipitación o exceso de euforia. Vayamos por detrás o por delante, hay que mantener la cabeza fría”.