La duodécima edición del Torneo Nacional de Árbitros, organizado por la Agrupación Deportiva O Silbato y celebrado ayer en los campos de A Torre, fue dominada de principio a fin por el combinado de colegiados de Mallorca.
Lo más novedoso del evento, de 28 equipos de 15 delegaciones, fue el debut de Sevilla y Tenerife. Reinó en todo momento el buen ambiente y el nivel fue creciendo conforme avanzaban las rondas.
Al final, se enfrentaron Mallorca y Ourense en el partido que decidía el título, con victoria para el conjunto balear en un duelo de mucho nivel.
Hubo tiempo también para que los árbitros homenajearan a su compañero Álex Vázquez, que se retiraba y contó con la presencia de sus familiares.
Una vez terminó el fútbol, los más de 350 participantes tenían una cena en la que pudieron conversar con calma