Una temporada tan especial como la 2024-25 para el Leyma Coruña lo tenía que ser no sólo en la pista sino también fuera de ella, y así está siendo para aquellos componentes de las diversas peñas naranjas.
Durante la temporada pasada se generó un clima de ánimo y de apoyo muy grande hacia el Básquet Coruña, ya fuera por el buen nivel mostrado en la pista o la cercanía mostrada por un grupo de jugadores que continuaba desde la temporada anterior y que generó un gran calado en la afición. Este se vio reflejado ya en esa campaña, con múltiples viajes a diferentes lugares de la geografía española.
Todo este trabajo por parte de dichos grupos fue la semilla de algo muy importante, que tuvo su eclosión principalmente hacia la segunda mitad de la temporada pasada y se puede decir que el histórico encuentro ante Estudiantes fue la chispa que encendió la llama naranja en la afición.
Pero se debe mencionar también otros grandes desplazamientos como son el derbi ante el Ourense, también el importante viaje a Torrelavega, o el de Logroño para el partido contra Clavijo. Todos ellos fueron verdaderos puntos de inflexión para una hinchada que no hacía más que ilusionarse, no solamente por el gran momento deportivo que vivía el equipo, sino también por la sensación de que se estaba conformando una verdadera familia, y muchos de los aficionados naranjas querían seguir formando parte de ella.
Fue este el momento en el que comenzaron a crearse más y más grupos de animación, como Sanedrín do Forno, Espíritu 23, los Cuñaos, Mandarina, Aglutínate, o Pío-pío. Un verdadero boom de la familia naranja, que conoció su máxima expresión ya hacia el final de la temporada.
Ese gran momento que vive la afición quiere reforzarlo el club con la creación de una Grada de Animación, la cual existe en otros pabellones, y que resulta de gran importancia para apoyar al equipo en todo momento. En el Palacio de los Deportes de Riazor, el sector de animación era el que usaba el Tsunami Naranja en la Tribuna Lateral, y en el momento en el que se creó la peña Espíritu 23 el uso de dicha zona fue compartido por ambas peñas.
Con la Grada de Animación, el club naranja pretende “reunir a los aficionados del club deseosos de implicarse activamente y de forma continuada animando, alentando y apoyando al equipo durante los partidos”.
Significará la acentuación de ese sentimiento y pasión que se comprobó principalmente la temporada pasada gracias a los colectivos previamente descritos y con la fundamental actividad del Tsunami Naranja no sólo animando en los partidos del Leyma, sino también con todas las actividades sociales llevadas a cabo fuera de la pista. Llega al Coliseum y al Básquet Coruña para tratar de que la afición viva el momento histórico en el que se encuentra el club de manera más especial y pasional. Otro de los objetivos de la Grada es que los aficionados que se encuentren en dicho espacio puedan transmitir una buena imagen de la afición hacia el resto de España.
Un ejemplo de este tipo de agrupaciones existen en equipos como el Breogán, en la que se unieron en primer lugar dos peñas: Peña Breogán y Embreogados. En la actualidad, antes de que comience la temporada 24-25, la Grada de Animación contará con las dos peñas previamente mencionadas y hasta 4 más: Fogar de Breogán, Breoñáns, Breoganas y Herdeiras do Minho.
Otras Gradas de Animación o peñas con gran tradición en el baloncesto español se encuentran en el Estudiantes: la mítica Demencia, la más antigua de España, con 49 años de historia; los Berserkers del Real Madrid, el Barcelona también cuenta con una grada de animación en la que se dan citan varias peñas e Indar Baskonia es otro ejemplo.
Las Gradas de Animación están presentes en diversos equipos del país (también en Granada, Gran Canaria, Manresa, Lleida, Joventut y Valencia) lo que reafirma la importancia de este tipo de grupos para la implicación social y la existencia de una conexión importante entre los aficionados y los clubes, haciendo que ambos vayan de la mano también en proyectos y actividades más allá de la pista.
Una función que empezará a desarrollar el Leyma Básquet Coruña con la gran afición que se ha generado y que sin duda apoyará al equipo siempre.
Dxt Campeón pulsó la opinión de varios de los grupos de animación de la Familia Naranja.
Berrallouco y el Tsunami Naranja no siguen |
Si hay un nombre que va unido al de la afición naranja es el de Gabriel Berrallouco Barros, un superhéroe con gorro de mago que hace las delicias de la afición en cada posesión. Uno de los aficionados que más aporta no solamente en la grada si no también fuera de ella desde hace ocho temporadas, junto con el Tsunami Naranja.
Clave para que la afición estuviese cada vez más unida y surgiesen cada vez más peñas o grupos de animación del Básquet Coruña en la actualidad, Gabriel anuncia que “es una etapa cerrada”. Ni él ni la mítica peña de animación naranja estarán en la grada la temporada que viene, como grupo de animación.
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