En la segunda entrega de la entrevista a Fernando Romay, el legendario pìvot coruñés habla de un poco de todo, pero fundamentalmente de el peligro de extinción de la filosofía de club, de la evolución/involución del baloncesto y de su preocupación por el trato que se está dando España a los jugadores nacionales.
En la década de 1980, los deportistas todavía no se habían convertido en los iconos que son en la actualidad. ¿Qué opina de la relevancia que ha cobrado el deportista? Incluyendo una faceta, la de ejemplo para la juventud, que, tal vez, es algo injusta. Una carga.
Nosotros también la tuvimos. Gracias a Dios. Es una gran carga. Fernando Martín dijo algo sobre eso, y no estoy de acuerdo con él. Un deportista también es una persona pública, y en el momento en que eres una persona pública y lo aceptas y te pagan por ello, tienes que ser un ejemplo para la sociedad. Y te tienes que cuidar de hacer o decir ciertas cosas.
En los tiempos actuales, el escrutinio, sobre todo a través de las redes sociales, es mucho mayor que hace cuarenta años. Y rara es la ocasión en que, si un personajes público expresa una opinión, esta no molesta a un colectivo o colectivos.
Sí, sí. En el mundo en el que estamos, del buenismo absoluto... Pero hay que relativizar. No todos los comentarios tienen el mismo valor. Un tío que se declara hater, o sea, odiador... Le tienes que decir, “pues vale, sigue odiando”, porque, hagas lo que hagas, te va a buscar. Lo que tienes que ser es consecuente y estar contento contigo mismo, pero no te puedes relajar y pensar que “yo juego al baloncesto y el resto me la trae floja”. Y darme igual que me pillen con los calzoncillos en la mano, haciendo ¡oé-oé-oé! en una fiesta. Eso también lo tienes que controlar porque, quieras o no, eres un ejemplo para muchos chavales que están yendo a verte jugar.
En el basket nacional el jugador español tiene que tener mucho más protagonismo
Al pueblo soberano, sin embargo, le cuesta aceptar que, aunque generalmente gane más dinero, el deportista profesional es un trabajador como otro cualquiera. Que es libre de cambiar de empresa como lo hace cualquier no deportista. ¿Es otra carga?
Es la ley del mercado.
Volvemos al baloncesto. ¿Cómo valora la evolución del baloncesto español desde la plata olímpica de Los Ángeles 1984?
Muy bien. Aunque me preocupan cosas. Por ejemplo, que unos chavales de 17 ó 18 años queden campeones del mundo y cuando tienen 20, en un Campeonato de Europa queden quintos o sextos. Y esto es porque en el baloncesto nacional el jugador español tiene que tener mucho más protagonismo. No puede ser que el Murcia, aunque este año ha sido un éxito, pero no tenía ningún español.
La gente no se da cuenta de que el Breogán se mantuvo gracias a una pareja de hermanos [los Quintela, Sergio y Erik] que, en un momento dado, pusieron a todo el equipo en fila. Hicieron ver a sus compañeros que si querían ir a equipos mejores, la forma era apretar el culo y sacar al Breogán adelante. Fue la diferencia con el Obradoiro, que no tenía nadie con esa filosofía de club.
Esa filosofía no tienen que tenerla el jugador uno, dos y tres; esos tienen que ser las figuras, pero el nueve, diez, once y doce sí pueden ser esos jugadores de club. Tenemos las mejores selecciones de formación, pero no se ven reflejadas arriba. He ido este año, por mi trabajo en la Federación, a un ascenso a LEB Plata, y un equipo de Salamanca tenía siete jugadores extranjeros y dos nacionales. Eso no puede ser.
Si un chaval de 2,20 no te vale, aunque sea para 10 minutos, algo estás haciendo mal
Una filosofía de club que parece estar en vías de extinción, a pesar de los grandes éxitos de la selección absoluta. ¿Es una paradoja?
De la absoluta y de las de formación. ¿Qué posibilidades tiene el Básquet Coruña –con todo mi respeto, que ojalá algún día llegue a hacerlo– de ganar algo en ACB? Una Liga o una Copa. Muy pocas. Entonces, ¿qué rendimiento puedes tener para ilusionar a tu gente? A lo mejor es tener algún jugador en la selección o en las de formación. O en una preselección. Son jugadores que pueden dar mucho prestigio al club.
Tienes que vender algo. Darle representatividad a jugadores de la zona. Además, si coges jugadores de la zona, tendrás más dinero para invertir en mejores extranjeros. Me gustaría hablar alguna vez con algún director deportivo para que me diga cosas. ¿Qué más da quedar noveno que décimo o décimo quinto? Si no vas llegar a nada. Aunque también es cierto que hablar desde fuera es fácil.
Puede que los clubes tengan dudas con sus mejores jóvenes porque, de unos años a esta parte, les hace tilín la NBA muy pronto. ¿Cree usted que puede haber precipitación?
Si no les das oportunidades, van a donde se las dan. La mayoría de las veces es cosa de sus agentes, que si los chicos hacen una buena temporada, les dicen que “hay que rentabilizar esto ya mismo”. Pero por encima del jugador tiene que estar el individuo.
Y ahora viene otra, las universidades americanas. Están pagando ya millón o millón y medio. Mira el caso de Aday Mara. Se va a UCLA, y su entrenador [en el Zaragoza] diciendo “¿pero por qué se va?”. Pues porque no le ha dado ninguna oportunidad en su equipo. Y es un chaval de 2,20. Si un 2,20 no te vale, aunque sea para diez minutos, algo estás haciendo mal. Hay que cambiar la mentalidad. Y darse cuenta de que sacar jugadores para las selecciones es un éxito. Porque ser campeón de liga es una cuestión de presupuesto. Si tienes 30 kilos, haces un equipo campeón. Clin, clin, caja.
A un jugador del Real Madrid que luego estuvo en el Maccabi [Dusan Vukcevic], su hijo [Tristan, actualmente en las filas de Washington Wizards] le dijo que quería jugar en el Maccabi. El padre le aconsejó que no, que se fuera al Madrid porque le iba a brindar más oportunidades, y que si tenia la calidad suficiente iba a jugar con el primer equipo y a salir lanzado hacia arriba. Jugó en el primer equipo, luego se fue al Partizan y ahora está en la NBA.
Ganar una liga es cuestión de presupuesto. Con 30 kilos haces un equipo campeón
Es como si la evolución del deporte profesional fuera asimismo una involución.
Tienes que saber hacer bien las cosas. ¿Cuál es el mérito del Depor? Que unió una forma de ser a una forma de obrar y la supo trasladar a la gente. Y a partir de ahí consiguió éxitos. Y eso hizo que luego, sin tener éxitos, esa forma de ser y de obrar le lleva a ser lo que es es hoy en día. Va mucho nuestro carácter, gente como la del mar, que curra como hijos de... ¿Por qué el resto de los deportes no son capaces de llegar a eso?
El sentir general es que porque no hay sitio para todo.
Mentira.
¿El problema puede ser que, como el resto de España, A Coruña es resultadista?
Ganar no sólo es conseguir triunfos, es conseguir hitos.
Hay demasiada gente que no lo entiende. Que únicamente le vale la medalla. Incluso quienes únicamente valoran el oro.
Sí lo entiende, siempre y cuando se lo vendas bien. Pero, por ejemplo, los propios directivos se encargaron de decir meses antes que en París íbamos a superar Barcelona 92. Y a veces no es cuestión superar eso, sino de tener un nivel mejor en los Juegos. Y el nivel también te lo dan los diplomas.
Los e-sports es jugar en chándal. No todo lo popular tiene que convertirse en deporte
En estos Juegos, además de batir su récord de medallas en deportes de equipo, España ha subido 18 veces al podio en 12 disciplinas diferentes. ¿Qué lectura hace de este dato?
Que tenemos menos potencial que otros países, peroa a cambio tenemos mucha calidad. Y una medalla se puede perder por o en una décima de segundo.
El COI, en su afán de acercar el olimpismo a la juventud, ha creado unos Juegos Olímpicos de e-sports. ¿Qué opina de esto?
No, no. No creo... E-sports es jugar en chándal. No todo lo popular tiene que convertirse deporte. Entiendo que el breakdance puede ser una modalidad de gimnasia en suelo, pero deporte hecho delante de una maquinita me cuesta verlo. A lo mejor es que soy muy viejuno en mi concepción (risas).
Hay deportes, como el pentatlón moderno, de origen militar y uno de los más antiguos del programa olímpico, que va sufrir una variación: fuera hípica, dentro ninja warrior. ¿Es usted partidario de actualizaciones de este tipo?
¿Qué deporte no es de origen militar? Carreras, lanzamientos, hípica, vela, lucha, boxeo... Casi todos los deportes tienen origen militar. Antiguamente las Olimpiadas se hacían para demostrar que militarmente eras mejor que los contrarios. Llevabas a tus campeones en todo. Luego se fueron haciendo otras cosas, pero el origen es ese. La evolución está bien siempre que sea coherente. ¿Por qué el ajedrez etá considerado un deporte? Porque es estrategia militar pura y dura. Pero no por ello tienes que meterlo en los Juegos, porque entonces también metemos el chinchón, la brisca y demás.