Un gol el domingo contra el Sant Just valió tres puntos de oxígeno para el Liceo, que viaja a Lleida para medirse este miércoles al colista Alpicat, recién ascendido (Pabellón Antoni Roure, 20.00 horas), sin que haya llegado a saltar la señal de alarma. La victoria llegó además en el momento justo, porque de aquí a que termine noviembre los verdiblancos afrontan cinco partidos en prácticamente quince días, con el arranque de la competición europea incluido. Esta misma semana toca doblete porque al duelo de esta noche le seguirá el del domingo, cuando el Liceo reciba en el Palacio al Calafell, uno de los equipos más en forma. La semana que viene otro (Trissino y Noia, los dos fuera) para terminar el mes con la visita a A Coruña del Oliveirense.
No llegó a cundir el pánico, pero las tres derrotas seguidas (Vic, Barça e Igualada) obligaron a poner las orejas tiesas e inevitablemente despertaron los fantasmas de la pasada temporada cuando el conjunto coruñés se quedó fuera de la Copa del Rey por primera vez en 17 años. Sacando analogías con el curso anterior, la recuperación en la segunda vuelta llegó cuando el Liceo consiguió reducir el número de goles recibidos. En su racha de siete victorias consecutivas solo encajó siete, con tres ceros (Rivas, Mataró y Lleida). El primer rosco llegó este año antes y Juan Copa quiere que a partir del trabajo defensivo se empiece a crecer hacia delante.
Porque el aspecto ofensivo es otra de las facetas en las que tiene margen de mejora. Ahora mismo son doce goles los que los verdiblancos han anotado en seis partidos, una media de dos por encuentro. Solo el Alcoi, con once pero un encuentro menos (el aplazado por la DANA, precisamente ante el Alpicat); el Igualada con diez y el Vic con ocho tienen menos.
Su rival de hoy le supera en esta faceta, con trece tantos en cinco encuentros (tiene aplazado uno) y también ha encajado menos, 15 por 17, aunque ha rentabilizado peor esos goles ya que de momento solo le han servido para empatar tres encuentros (Caldes, Reus y Lleida), con derrotas frente a Vilafranca y Voltregà.
Los ilerdenses contarán con la baja de uno de los veteranos de la plantilla, el jugador de origen alemán Mats Zilken, de 32 años, que vio una tarjeta rota en el partido del pasado sábado, el derbi frente al Lleida, por lo que tendrá que cumplir con la correspondiente sanción.
La plantilla dirigida por Jordi Expósito tiene jóvenes talentos, de hecho, igual que el Liceo, aporta tres jugadores a la primera convocatoria de la selección española Sub-23 de Pere Varias, con Xavier Bosch (portero), Iago Vázquez y Jan Munné. No está en esa lista, pero podía estarlo, Oriol Llenas. Pero su máximo realizador es uno de los veteranos, Miquel Serret, con cuatro goles.
El Alpicat es actualmente el colista de la OK Liga con 3 puntos, uno menos que el Vic. Pero el Liceo ya sabe lo que es perder este curso en la pista del último clasificado, porque también lo eran el Vic y e Igualada antes de su paso por allí. Teniendo en cuenta que no hay partidos fáciles, pero mirando el calendario, el Alpicat es un claro antes de la tormenta para un conjunto verdiblanco que quiere apuntar definitivamente hacia arriba y confirmar su mejoría en el torneo liguero.