El Deportivo Liceo sufrió para anotarse el primer punto de ante el Igualada, en un partido que, tras dominar por 4-1, se le complicó y tuvo que volver a ganarlo en la prórroga.

No tuvo un inicio brillante el vigente campeón. La oportunidad que, a los 2 minutos, no empaló Di Benedetto delante de Torrents, y el tiro al palo de Dava Torres unos segundos más tarde dieron paso a una fase de color azulgrana.

El Igualada, valiente, puso cerco a la meta de Serra. Y al tercer intento encontró premio: Llenas empujó a la red un preciso servicio de Vives. Y pudo ser peor si Marimón no rematase al aire en la cara de Serra. 
Sobre el minuto 7 cambió la decoración. Los de Juan Copa se hicieron con el control. Avisó Dava con una media vuelta que acabó en el tubo horizontal. Y no perdonó poco después. Triple presión a un jugador visitante. La bola robada se la quedó Alex Rodríguez, que encaró a Torrents y fusiló por bajo. 

El meta del Igualada salvó el 2-1 de manera milagrosa, con el stick, a remate a bocajarro de Manrubia. Luego se le apareció la virgen cuando Tombita la envió alta.

La insistencia verdiblanca obtuvo recompensa tras derribar Cervera a Manrubia. Azul. Alex lanzó directo, Torrents rechazó y el de Sant Hipolit de Voltregá, con calma y habilidad infinitas, alojó la bola en la portería. Un misil de Carballeira al travesaño completó el catálogo de peligros de la primera mitad.

El de la segunda lo abrió Alex. Dejó atrás a dos jugadores, burló al portero y la incrustó en la red. El hombre del partido adornó su ‘hat-trick’ con una asistencia. Robó la bola, lanzó la contra, sirvió a Dava Torres y el capitán superó a Torrents. Parecía la sentencia.

Pero llegó una inexistente infracción contra el Liceo. Protestó Copa, protestaron los suyos. El Igualada sacó y Zilken se vio solo ante un Serra despistado.  Y el partido se descontroló. Copa vio la azul por seguir protestando. Aunque la inferoridad acabó con 0-0, los 3 minutos siguientes fueron una pesadilla. Marimón hizo el 4-3 tras un rebote y Riba, solo en el segundo palo, igualó. 

No pasó nada reseñable en los primeros 4 minutos de la prórroga. A falta de 49 segundos, décima falta visitante. Y Alex repitió: falló el tiro directo pero no en el rechace. Un póker con valor de oro en una serie sin margen de error. 

Y tampoco pasó nada en los segundos cinco minutos de prolongación. Hasta que faltaban 18 segundos. Ya sin portero el Igualada, Vives evitó el sexto del Liceo moviendo por completo la portería. Carballeira erró a bola parada pero no hubo tiempo para más.