El Deportivo Liceo no gana un Clásico desde el 5 de marzo de 2022, el mismo año que se proclamó campeón de la OK Liga. Desde entonces, siete derrotas en siete enfrentamientos contra el Barça, cinco entre las finales de la última Copa del Rey, los pasados playoffs por el título liguero y la reciente Supercopa.
Las estadísticas están para romperlas, dicen, y el equipo coruñés afronta un doble cara a cara, el sábado 25 de noviembre en la competición doméstica (17.15 horas) y el jueves 30 en la apertura de la Champions, con los sticks afilados para asaltar el Palau, tarea que parece imposible.
No pierde el Barça un partido oficial desde aquellos playoffs del 22 –cayó en semifinales contra el Reus, a la postre víctima liceísta– y en casa ni se recuerda su última derrota, al menos en competiciones nacionales.
Confianza y rotación corta
El Liceo, que puede presumir de grandes tardes en el Palau, llega cargado de confianza tras encadenar tres victorias por vez primera esta temporada (Caldes, Lleida y Girona), pero con una rotación mermada por la lesión de Bruno Saavedra y al no poder contar con su último fichaje, el argentino Guido Pellizzari.
Con el recuerdo de la final de la Supercopa (3-2), un partido igualado y en la que el equipo coruñés tuteó a su gran rival, el técnico Juan Copa celebra la vuelta a la normalidad en los entrenamientos con el regreso de Fran Tombita –jugará con casco para proteger la fractura en los huesos de la nariz– y la incorporación de Pellizzari.
“Las tres victorias nos han dado estabilidad y tranquilidad. Eran vitales”, destaca Copa, que ha puesto el foco “única y exclusivamente en la OK Liga, intentando acercarnos al partido que hicimos en la Supercopa, aunque no creo que se vaya a parecer mucho porque ellos en el Palau son más fuertes”.
Vuelve Bargalló
El plan de partido ha cambiado a última hora con la convocatoria de Pau Bargalló, MVP de la pasada OK Liga, ausente desde que se lesionó en la jornada 4 contra el Noia: “Evidentemente cambia todo. Pau es el referente y el líder del Barça, un jugador por el que pasan muchas estructuras de su juego y una variante a tener en cuenta”, asume Juan.
El técnico liceísta afina sobre los peligros azulgranas: "Son muy ordenados en el 4v4, rápidos y precisos con la bola, pero también peligrosos en las transiciones. Hay que buscar el equilibrio, que será una de las claves. Si nos juntamos bien podemos sacar buenas contras, pero es muy importante terminarlas”.
En el cuadro local son baja el exliceísta Matías Pascual y el veterano Sergi Panadero por lesión. Completan la lista de Edu Castro los jóvenes Miki Escala y Eloi Cervera, con ficha del Barça Atlétic. El fondo de armario del campeón es muy amplio. El Liceo tendrá que combatirlo con cabeza, corazón y los sticks afilados.
