La antepenúltima jornada de la primera vuelta, lejos de aclarar algo la batalla por disputar el torneo de mitad de temporada, lo que ha hecho es enturbiarla un poco más. Un atasco en toda regla en la barra para intentar agarrar una Copa.
El principal culpable es el Estudiantes, que sin Michael Carrera ni Francis Alonso fue capaz de vencer (87-91) en casa del líder, el Miraflores Burgos, con el que ahora comparte la cabeza de la tabla. Tan igualados están que la diferencia entre puntos anotados y encajados es de sólo tres (175-172) favorable al equipo castellano.
El conjunto madrileño podría acabar acordándose de que a falta de 3:51 para el final dominaba por 17 puntos (69-86) y terminó liándose, con varios balones perdidos, en el último minuto. Incluso el Burgos falló dos triples y un palmeo en la penúltima posesión y con 85-90 en el marcador.
Tercero en discordia sigue siendo el Leyma Basquet Coruña, que cumplió su doble misión en el derbi ante el Ourense, ganar y hacerlo por un buen puñado de tantos de margen (106-77). Su diferencial es de +141. Y su calendario, sobre el papel más fácil que el de los dos primeros, ya que visitará al Amics Castelló (4-11) y recibirá al Melilla (7-8).
El Burgos jugará la próxima jornada en la cancha de su vecino el CB Tizona, que el sábado cayó en Alicante (94-89) y se descuelga casi definitivamente de la lucha copera, lo mismo que el Real Valladolid con la dura derrota en Oviedo (83-66); su escaso diferencial (+11) lo borra de la lista de candidatos. El plantel que dirige Lolo Encinas cerrará la primera vuelta recibiendo a un Real Betis que todavía no ha levantado cabeza (4-11).
El Estudiantes, por su parte, recibirá al COB (7-8) y cumplirá el ecuador del curso en un duelo con visos de final en la pista del cuarto aspirante, el Gipuzkoa, que el jueves se deshizo del Estela Cantabria (76-67) y mantiene el pulso con el Leyma, aunque su diferencial de puntos es 35 menor que el de la marea naranja.
La última fecha de 2023 no sólo ha enturbiado la lucha por acceder a la Copa Princesa de Asturias, también ha comprimido la zona noble a punto de llegar a la mitad del curso. La dureza de esta liga hace que un partido ganado o perdido sea, en muchas ocasiones, algo más que una simple victoria o una simple derrota.
Para el Leyma, la jornada 15 no ha sido la mejor a efectos coperos, pero a efectos ligueros lo sitúa más cerca de acceder al liderato.