Osasuna volvió a ser una roca en el Santiago Bernabéu y minimizó al Real Madrid, que se mostró impotente para continuar con su serie de victorias, Karim Benzema, en su reaparición, falló incluso un penalti y entregó al Barcelona el liderato de LaLiga Santander.
Pese a la vuelta del delantero francés, las ausencias de entrada del meta belga Thibaut Courtois, del uruguayo Fede Valverde (de inicio) y del croata Luka Modric se notaron demasiado. No tuvo claridad en su juego ante un equipo tan bien armado como el de Jagoba Arrasate y lo pagó con el pinchazo que le deja segundo empatado con el equipo barcelonista.
Ni siquiera el hecho de adelantarse antes del descanso con un centro-chut de Vinicius Jr. le permitió amarrar el partido al conjunto de Carlo Ancelotti, porque Osasuna respondió al inicio del segundo periodo (m.50) con un remate de cabeza de espaldas de Kike García que pilló al meta ucraniano Andriy Lunin algo adelantado.
Luego Osasuna se pertrechó bien ante un Real Madrid sin ideas ni precisión para desbordar el entramado que tenía delante. Además le faltó acierto a Benzema. La pasada campaña Sergio Herrera le paró dos penaltis en El Sadar. Esta vez no le hizo falta. El capitán blanco disparó con fuerza, alto. El balón rozó el larguero y se marchó fuera.
La pena máxima, decretada tras acudir el árbitro al VAR, significó además la roja de David García. En superioridad, con un cuarto de hora por delante incluida la prolongación, el Real Madrid incrementó la presión y el acoso, pero de forma absolutamente inoperante y volaron los dos primeros puntos de la campaña.
Sin el técnico Eduardo 'Chacho' Coudet en el banquillo, al tener que irse a Argentina por un problema personal, el Celta frenó la macha del Betis del chileno Manuel Pellegrini gracias a una brillante acción de Gabri Veiga y a las paradas del argentino Agustín Marchesín.
El joven canterano, que estrenaba titularidad, abrió el partido de forma espectacular. El Celta, pese a la ausencia de salida de su gran referente, Iago Aspas, tomaba el mando con una acción de habilidad y un tremendo disparo del gallego al que no pudo responder el meta luso Rui Silva.
Todo se le ponía el contra el Betis, que para colmo perdió por roja directa al brasileño Luiz Felipe a los 19 minutos. Aún así, con Sergio Canales y el francés Nabil Fekir al mando, estuvo muy cerca de salvar al menos un punto, pero se topó con un inspirado Marchesín.
El equipo vigués, este domingo dirigido por el también argentino Ariel Broggi, pone fin a una racha de dos derrotas y se instala en el ecuador de la tabla, mientras que el Betis baja al cuarto puesto, superado por el Athletic, que goleó al Almería en el primer encuentro de esta séptima jornada.
La Real Sociedad se instala a las puertas de los puestos europeos, empatado con Atlético de Madrid y Osasuna, tras sobrevivir a un partido loco, de remontadas, ante el Girona en Montilivi (3-5), donde tuvo una pegada inusual: cinco tiros entre los tres palos y cinco goles.
Al descanso se llegó con empate a dos gracias a dos tantos del noruego Alexander Sorloth (m.8 y 42) para el equipo vasco, y a un espectacular golazo de Rodrigo Riquelme (m.23) y a un testarazo de Arnau Martínez (m.27).
En el inicio del segundo periodo, una galopada del argentino Taty Castellanos (m.48) devolvió el mando al cuadro de Míchel Sánchez, que tuvo que seguir el partido desde una cabina por sanción, pero la Real Sociedad sacó provecho a su eficacia y se llevó el encuentro con dianas de Brais Méndez (m.66), Martín Zubimendi (m.71) y el japonés Take Kubo (m.85).
El Valencia del italiano Gennaro Gattuso logró su primer punto lejos de Mestalla en el RCDE Stadium ante el Espanyol (2-2) de forma increíble por un tremendo error en el minuto 96 del guardameta Álvaro Fernández, que poco antes se había convertido en salvador de su equipo.
El portero riojano creía que un balón enviado (no rematado) por el suizo Eray Comert se marchaba y lo dejó pasar. Para su desgracia y para alegría desmedida del helvético y todo el Valencia, entró el esférico y al Espanyol se le escapó la primera victoria de la campaña en casa, que tenía en su mano tras la remontada protagonizada por Joselu Mato (m.56) y Sergi Darder (m.83) después de que abriera la cuenta para los visitantes el hispano-brasileño Gabriel Paulista (m.53).
Fue un desenlace inesperado, alegre para los valencianistas y tremendo para los espanyolistas, en un partido en el que hubo una roja por bando, al brasileño Marcos André en el visitante y al danés Martin Braithwaite en el local. Todo quedó empañado y marcado por la decisión de Álvaro de no atrapar el balón.