El Atlético de Madrid resurgió de sus cenizas este sábado al conseguir una victoria épica frente al Valencia (3-2) y despachó con creces el peor momento de la 'era Simeone' gracias a los goles de Mattheus Cunha, Ángel Correa y Mario Hermoso, que fue el salvador de los colchoneros a los 93 minutos de juego.

El equipo del 'Cholo' ofreció una primera parte en la línea de la última semana, en la que se despidió de dos títulos, pero fue capaz de levantarse fiel a su emblema del "coraje y corazón" para acabar tumbando a un Valencia al que se le hizo largo el partido. Los 'che', tras un gran esfuerzo defensivo, se fueron de vacío sin merecerlo.

La noche prometía en el Metropolitano con la parroquia dando el cariño que necesitaba su mentor. Simeone se reencontró con su 'personaje', el que arenga a la grada, el que vive de las emociones y el que diseña siempre un Atleti mejor, aunque el viento sople en contra después de una campaña para olvidar.

Así empezó el partido, con un Valencia dominador en los duelos y capaz de ponerse por delante en una jugada de Yunus Musah tras un gran cambio de orientación de Guedes. El quiebro y el disparo del americano fueron letales para Oblak y una zaga bastante descolocada. Otra vez el mismo dolor de muelas de San Sebastián y Riad. Otra vez la misma historia.

Más se alarmó la grada, aunque no paró de cantar a los suyos, cuando Hugo Duro logró el segundo al borde del descanso. El canterano del Getafe se adueñó de un balón de Carlos Soler que no pudo ser despejado después de tres intentos por parte de los centrales colchoneros. El despropósito puso alas a un Valencia que jugó con inteligencia.

Los de Bordalás se fueron apagando, pero siempre guardaron la compostura ante un Atlético con más hambre. Luis Suárez avisó con un disparo lateral y Cunha, pasada la hora de partido, encontró el premio en un córner donde remató libre de marca -con el pie- en el área pequeña del Valencia. Un regalo que metió a los locales en el choque.

A partir de ahí todo fue del Atlético, que encontró en Yannick Carrasco al mejor argumento para encajonar en su área al equipo de la capital del Turia. El belga destacó con su desborde y cambió el partido en los metros finales, ya sin la rigidez de la primera parte. Muchas de sus jugadas acabaron con el 'uy' en la grada y en una de las últimas, minuto 91, apareció la magia.

Carrasco metió un pase con el exterior al corazón del área para que Suárez rematase de cualquier forma. El balón lo repelió Doménech y Correa, con la caña preparada, pescó el empate cuando todavía quedaban siete minutos de añadido.

Una eternidad para el Valencia, que acabó sufriendo el 'miedo' del Metrpolitano.

Fue en el '93 cuando Cunha, apurando la banda derecha, tiró a portería pero con tal fuerza que se desvió al segundo palo. Ahí apareció Mario Hermoso, que enjugó todos sus errores reciente con un gol salvador para los rojiblancos. Tres puntos que calman las aguas y ponen fin a una hemorragia preocupante. El Atleti ha vuelto. 

FICHA TÉCNICA.

RESULTADO: ATLÉTICO DE MADRID, 3 - VALENCIA, 2 (0-2, al descanso).
ALINEACIONES.
ATLÉTICO DE MADRID: Oblak; Vrsaljko (Herrera, min.61), Giménez, Hermoso, Lodi (Correa, min.46); Koke, De Paul, Lemar (Cunha, min.57), Carrasco (Javi Serrano, min.98); Luis Suárez y Joao Félix (Felipe, min.57).

VALENCIA: Doménech; Correia (Mosquera, min.72), Diakhaby, Alderete (Koba, min.54), Lato (Jesús Vázquez, min.72); Musah, Foulquier, Soler, Guillamón; Guedes y Hugo Duro (Maxi Gómez, min.72).

GOLES:
0-1, min.25, Musah.
0-2, min.44, Hugo Duro.
1-2, min.64, Cunha.
2-2, min.91, Correa.
3-2, min.93, Hermoso.
ARBITRO: Díaz de Mera Escuderos (C. Castellano-manchego). Amonestó con tarjeta amarilla a Correia (min.14), Foulquier (min.37), Musah (min.43), Guillamón (min.62), Lato (min.66) y Doménech (min.83) en el Valencia; y a Koke (min.31), Hermoso (min.37), Luis Suárez (min.82), Herrera (min.84) y Giménez (min.93) en el Atlético de Madrid.

ESTADIO: Estadio Wanda Metropolitano. 44.999 espectadores.
OBSERVACIONES: Dentro de los actos de celebración por el 75 aniversario del cambio de denominación del club, el Atlético de Madrid rindió tributo a los socios que llevan 75 años de manera interrumpida en el descanso del partido.