El Cádiz ganó este domingo por 1-0 al Celta para lograr la permanencia matemática en LaLiga Santander por su mejor balance en los enfrentamientos directos y tras un triunfo muy trabajado que se obtuvo gracias a un gol de Rubén Sobrino en el minuto 53.
En la primera parte, un fútbol sosegado fue la tónica durante los primeros minutos. Ambos equipos querían controlar un juego en el que tomó el mando el Cádiz con un paso adelante.
El Celta fue el primero que lo intentó con dos disparos seguidos, el primero del peruano Renato Tapia que se marchó fuera, y otro de Carles Pérez que detuvo el argentino Jeremías Ledesma (m.3). Iván Villar salió muy bien a los pies de Sergi Guardiola cuando le iba a recortar, en un avance peligroso del Cádiz (m.18).
Los gaditanos lo intentaron cinco minutos después en un chut del belga Theo Bongonda de primeras que se fue desviado (m.23). Este mismo jugador cayó en el área visitante en pugna con Javi Galán y De Burgos Bengoechea señaló penalti, que finalmente no fue sancionado al revisar la jugada en el VAR (m.34).
El sistema de videoarbitraje volvió a intervenir antes del descanso en contra de los intereses del Cádiz al determinar fuera de juego en la acción anterior a un tanto de cabeza de Lozano (m.40).
Tras la reanudación, el Cádiz se adelantó en el marcador con un gol de Sobrino, que cruzó el balón lejos del alcance de Villar tras un pase del argentino Gonzalo Escalante (m.53).
El Celta tomó el mando y con la entrada de varios cambios, entre ellos el goleador Iago Aspas, se encomendó a los balones al área local para intentar empatar.
Un cabezazo de Domingos Paciencia lo detuvo Ledesma (m.67) en una buena parada en la mejor ocasión de los célticos. Con las líneas juntas, el equipo dirigido por Sergio González mantuvo un riguroso concepto táctico ante el que nada pudo hacer el rival.
Los ataques del equipo gallego eran cercenados por la defensa del conjunto gaditano, que vio cómo pasaron los minutos hasta felicitarse por el objetivo logrado.