“¡Qué nivel mostraste! ¡Qué rabia tu lesión! ¡Qué gran apoyo has sido estos meses!”, escribió Borja Jiménez a Víctor García cuando el futbolista valenciano se despidió del deportivismo hace unos días en las redes sociales.
Las palabras del técnico blanquiazul expresan a la perfección la temporada del polivalente jugador, cuyo excelente rendimiento se vio frenado en seco por unos problemas en el tobillo que aunque inicialmente parecían deberse a un esguince, se complicaron hasta el punto de impedirle competir durante la segunda mitad de la campaña.
El club anunció el regreso de Víctor el 27 de agosto del pasado año. El valenciano ya había formado parte del Fabril durante la liga 2018-19, con el que había disputado 36 partidos y había marcado siete goles. Además, había debutado con el primer equipo en una eliminatoria de la Copa del Rey.
En esta ocasión, volvía cedido por el Real Valladolid y aunque comenzó el curso desde el banquillo, ya que su estreno se produjo cuando restaban 16 minutos de la segunda jornada, a la semana siguiente se hizo un sitio en el once y fue un fijo en el esquema de Borja Jiménez hasta que los problemas físicos le impidieron seguir jugando.
Trilli, que había debutado a lo grande frente al Celta B, se lesionó una semana después con la selección española sub-19 y el técnico blanquiazul se vio obligado a improvisar un lateral derecho. La polivalencia de Víctor García permitió al valenciano, pese a ser un extremo, desenvolverse de maravilla en la retaguardia.
Actuó como lateral en los catorce encuentros de liga que disputó durante la temporada 2021-22 y se mostró como un puñal, dando profundidad por el costado derecho y haciéndoselo pasar especialmente mal a sus marcadores.
Ganaba línea de fondo con facilidad, encaraba, se internaba en el área rival y colgaba centros que generaban serios apuros en las zagas contrarias. Aun así, no marcó ningún tanto y repartió una sola asistencia. Fue en la derrota con el Real Unión en el Stadium Gal (1-2), cuando sirvió un centro desde la línea de fondo que Noel envió al fondo de la red.
El jugador cedido por el Pucela era uno de los ‘intocables’ del entrenador deportivista. De hecho, fue titular en doce de los catorce encuentros que disputó en la primera vuelta. 1.096 minutos en total.
El 23 de enero vistió la camiseta blanquiazul por última vez. Unos días después sufrió un golpe durante un entrenamiento y aunque parecía que se trataba de un esguince de tobillo, la lesión se complicó y no pudo volver a jugar en lo que restaba de curso.
A medida que avanzó la segunda vuelta, Borja Jiménez perdió la esperanza de poder volver a contar con el valenciano. De hecho, a mediados de abril dijo: “no soy optimista con verle lo que resta de temporada”. Y así fue.
El 30 de junio finalizó su cesión desde el Valladolid. Víctor García reconoció haber estado a gusto en A Coruña y que le gustaría regresar, pero hay muchas dudas sobre su estado.