El Real Madrid Castilla infligió el pasado domingo a la escuadra deportivista su primera derrota de la temporada lejos de Riazor (1-0) y la segunda en total en lo que va de la liga 2022-23.
Aunque ni las sensaciones ni los resultados en los tres primeros desplazamientos de la temporada habían sido demasiado buenos, al menos el Depor se mantenía invicto a domicilio hasta que visitó el campo Alfredo Di Stéfano de la Ciudad Deportiva de Valdebebas.
Los blanquiazules sumaron los tres puntos en su primera cita del curso fuera de casa. Fue en Mérida en la segunda jornada (0-1), donde un gol de Raúl Carnero a los 35 minutos concedió el triunfo al equipo coruñés, dirigido por Borja Jiménez en aquel momento.
La siguiente salida se saldó con un empate en Balaídos contra el Celta B (1-1) que escoció mucho.
Iker Losada adelantó al filial celeste cuando aún no se había cumplido el primer minuto del partido y aunque Villares empató a cinco del descanso, el cuadro vigués tuvo la pelota y el control del encuentro.
Tras el pinchazo en Vigo, el Depor afrontó dos citas seguidas en Riazor. Ganó al Talavera (3-2) en un duelo aplazado de la primera jornada y sufrió su primera derrota de la temporada con el San Fernando (0-1).
El tropiezo dejaba a Borja Jiménez al filo del abismo y la destitución del técnico abulense se concretó tras la jornada posterior, ya que los herculinos no fueron capaces de pasar del empate en el campo del Rayo Majadahonda (0-0).
Hasta ese momento, los deportivistas habían firmado un triunfo y dos empates lejos de los muros de Riazor.
La nueva etapa, con Óscar Cano en el banquillo, se inauguró con una victoria en tierras herculinas frente al Linares (2-1). Pero la reacción duró poco y en la primera salida, en casa del Castilla, tocó morder el polvo (1-0).
El bloque deportivista continúa con su pobre inicio de temporada que le lleva a haber dejado escapar ya doce puntos de los 27 que ha disputado en las primeras nueve jornadas.