Todo está preparado para que el Palacio de Riazor abra mañana la gran final de la OK Liga. El recinto herculino dictará buena parte de la sentencia, ya que acogerá un máximo de tres partidos en esta serie por el título que se disputa al mejor de cinco encuentros. En la presente campaña, Riazor ha sido un gran vivero de puntos para el Liceo. Pero no se puede fiar ante un Reus que, en las últimas semanas, presenta un espectacular balance de efectividad cuando juega como visitante.
Lo demostró en la reciente semifinal contra el Barcelona. Dos de sus tres victorias las consiguió en el Palau Blaugrana, al imponerse en el primer partido por 3-5 y en el quinto y último por 3-4.
Un logro al alcance de pocos, y que sirvió para eliminar al equipo que había dominado con mano de hierro la fase regular.
Pero hay más, ya que un triunfo a domicilio también fue fundamental para que los tarraconenses superasen la ronda de cuartos de final.
Los de Jordi García perdieron el primer partido en su feudo frente al Lleida por 3-5. Sin embargo, en la ciudad ilerdense remontaron el vuelo, al ganar por 1-2. En el tercer y definitivo encuentro, los rojinegros vencieron por 4-2, logrande de esta manera el pase para semifinales.
Resumiendo, que en estos playoffs el Reus ha ganado tres de los cuatro partidos que ha disputado a domicilio. Un 75% de efectividad que ahora quiere mantener en la final.
Curiosamente, en estas eliminatorias al conjunto tarraconense le han ido mejor las cosas como visitante que como anfitrión. En el Palau d’Esports presenta un balance de dos victorias y dos derrotas, una en cada ronda.
En lo referente al Liceo, la trayectoria que presenta esta temporada en Riazor es casi perfecta. En la fase regular de la OK Liga no falló, con pleno de victorias (trece). Lo mismo le está sucediendo en los playoffs, con una victoria sobre el Alcoy y tres ante el Noia.
El único ‘pero’ tuvo lugar en la Golden Cup, que el Liceo disputó como anfitrión. En la fase de grupos derrotó al Braga (5-3) y al Barcelos (4-8). En cuartos superó al Noia (6-0), pero en semifinales cayó frente al equipo que posteriormente se proclamó campeón, el Benfica (3-4). Es la única vez que los aficionados verdiblancos han visto perder a su equipo en la presente campaña.
Otro dato son los enfrentamientos directos. Liceo y Reus se han enfrentado tres veces en el curso actual.
Los coruñeses ganaron a los catalanes en Riazor por 4-3, pero perdieron ante el mismo rival en el Palau d’Esports (5-4). El tercer duelo se celebró en los cuartos de final de la Copa del Rey. Y los rojinegros volvieron a ganar (1-4).
Así que por lo que se puede apreciar en los datos más recientes, es difícil hacer un pronóstico de lo que puede suceder en la final. Son dos equipos que se conocen perfectamente y que llegan en un buen momento a la eliminatoria decisiva. La solución, a partir de mañana.
Riazor acogerá ese día a las 21.00 horas y el domingo a las 12.00 los dos primeros partidos de la final. El tercero tendrá lugar el viernes de la semana que viene, en Reus. Si fuesen necesarios, el Palau d’Esports sería el escenario del cuarto partido el domingo 19, y el Palacio de Riazor el del quinto el martes 21.