El italiano Lorenzo Milesi, reciente campeón del Mundo contrarreloj sub’23, se enfundó el primer maillot rojo de líder de la 78 edición de la Vuelta a España tras el triunfo sorpresa del DSM Firmenich en la contrarreloj inicial disputada en Barcelona bajo una intensa lluvia que complicó el recorrido de 14,8 km.

Sorpresa grande, pero comprensible dadas las condiciones meteorológicas. Si fue una sorpresa el triunfo del DSM, también lo fue el chaparrón que cayó sobre Barcelona y la oscuridad que afectó a los últimos participantes.

La luz fue para el conjunto francés, quien se llevó el pulso colectivo con un tiempo de 17.30 minutos, a una media de 50,736 km/hora, tan solo 52 centésimas mejor que el Movistar de Enric Mas, segundo clasificado. La tercera plaza fue para el EF Education, a 6 segundos, empatado con el Soudal del belga defensor del título Remco Evenepoel, el más beneficiado de los grandes favoritos.

Tuvo mucha culpa la tormenta de agua del resultado de la crono. Pocos quisieron arriesgar más de la cuenta el primer día de carrera. Evenepoel logró sacar renta de 25 segundos respecto a Roglic y Vingegaard, los enemigos del Jumbo Visma y 30 respecto a Juan Ayuso (UAE Emirates).

Un primer pellizco más que significativo a favor de Evenepoel, quien comienza la Vuelta marcando territorio. Movistar cumplió una muy buena crono, pero se quedó con la miel en los labios.

RUBIALES Y LA LLUVIA PROTAGONISTAS EN LA SALIDA

Después de varios días de calor extremo se presentó la lluvia coincidiendo con la salida del primer equipo, el Caja Rural. Una lanzadera instalada en la Playa de Somorrostro fue el escenario para lanzar un espectáculo ciclista que no se vivía en la Ciudad Condal desde 1962.

También se presentó el “asunto Rubiales” en la salida de la Vuelta, un tema que eclipsó en gran medida a las estrellas del ciclismo. El presidente del CSD, Víctor Francos, explicó ante la prensa la decisión del Gobierno de mantener “la hoja de ruta” de denuncia contra el autor del “piquito” a la futbolista campeona del Mundo Jenni Hermoso.

Ya con el ciclismo de protagonista, y bajo la lluvia, los equipos fueron desfilando por el circuito de 14,8 km que atravesó las puntos más emblemáticos de la Ciudad Condal. Un viaje con 20 curvas que exigía precaución en cada pedalada por calles encharcadas de la Diagonal, Sagrada Familia, Paseo de Gracia, Plaza de España, hasta la meta de la Avenida Reina María Cristina.

MOVISTAR CON LA MIEL EN LOS LABIOS

El primer tiempo a batir y con aroma a opciones lo marcó el DSM de Romain Bardet, con 17.30 minutos, a 50.756 km/hora. Un registro que no pudo superar un desafortunado Ineos, con caída de De Plus y pinchazo de Filippo Ganna. La escuadra inglesa llegó con 5 hombres a 20 segundos del líder provisional.

Una sorpresa inicial que se convirtió en definitiva. Fueron llegando los equipos uno a uno, cada vez con menos luz y con las calles más encharcadas. El Jumbo, ganador el año pasado en Utrecht, marcó 18.02 y se conformó con evitar caídas.

Movistar iba dando señales de gloria marcando el mejor tiempo a mitad de crono. La escuadra española se presentó en la recta de meta con opciones al triunfo, pero se quedó con las ganas por un tiempo inapreciable. La fiesta comenzó en la sala de las sillas calientes con los componentes del DSM formando una piña.

Restaban dos equipos por pasar. La máquina del Soudal también marchaba con aires triunfales, pero se quedó a 6 segundos, y el UAE de Ayuso y Almeida se llevó la peor parte del pastel. Evenepoel les endosó medio minuto a las primeras de cambio.

MILESI, PROMESA ITALIANA, EL MÁS FELIZ

Al final el más dichoso fue Lorenzo Milesi, quien recientemente se proclamó en Glasgow campeón del Mundo de crono sub’23. El ciclista de San Giovanni Bianco, de 21 años, es una de las promesas del ciclismo italiano. Tendrá el honor de lucir la roja de la Vuelta en la segunda etapa que finaliza junto al Castillo de Montjuic. Un buen regalo, e inesperado.

Este domingo se disputa la segunda etapa, primera en línea, entre Mataró y Barcelona, jornada de media montaña de 182 km. Las dificultades del recorrido serán el Coll de Sant Bartomeu (3a, 6,6 km al 4,5), el Coll D’Estenalles (2a, 12,1 km al 3,9) y elCastell de Montjuic (3a, 0,9 km al 9,4).