El Real Madrid se anotó la duodécima victoria en la liga al derrotar al Gran Canaria por 105-85, merced a la gran actuación de Walter ‘Edy’ Tavares que marcó la diferencia con 21 puntos, 5 mates y 5 tapones para 25 de valoración en menos de 19 minutos en pista.
La buena puesta en escena del Real Madrid, amparado en la intimidación del Walter Tavares, pilló a contrapié al Gran Canaria que a los 3 minutos ya perdía por 11-2.
Jaka Lakovic, entrenador del Gran Canaria, tuvo que parar el partido y dar entrada a John Shurna y Khalifa Diop. El cambio de interiores surtió efecto de inmediato y el equipo canario empató a 13 (min.5.30).
El intercambio de canastas se sucedió hasta el final del primer cuarto, que concluyó con 25-23.
En el segundo acto, el Madrid decidió subir su nivel defensivo, lo que unido al poder anotador de Dzanan Musa comenzó a quebrar las opciones del Gran Canaria, que a los 15 minutos vio como el marcador reflejó una ventaja de 10 puntos, 38-28.
Vincent Poirier también dominó los aros, aunque Diop estuvo a buen nivel, y los buenos minutos de Sergio ‘Chacho’ Rodríguez impulsaron a los locales a llegar al descanso con una buena ventaja, 50-36, tras un parcial de 25-13. La diferencia de 21-13 en los rebotes, fue otra de las claves.
En la reanudación y con Tavares de nuevo en pista, el Madrid siguió dominando y aumentando su renta, 56-38 (m.22). La pobre actuación de Inglis y la falta de control del rebote le pasaron factura al Granca.
Los 20 puntos de ventaja llegaron en el minuto 25.20, 65-45, con los isleños intentando encontrar algún remedio ante la superioridad de Tavares.
La oportunidad visitante llegó con una serie de discutidas, por el público, decisiones arbitrales, tres técnicas a los madridistas incluidas, que dos triples consecutivos de Adam Hanga neutralizaron hasta el 76-60 con el que finalizó el tercer cuarto.
Con Poirier de nuevo en pista, no decayó el dominio del Madrid bajo los aros, aunque Diop tuvo acciones de auténtico mérito, calidad y potencia física.
El marcador, 90-69 (m.34) fue apagando las opciones del Granca, que siguió intentando no bajar los brazos. El partido languideció, salvo por algunas buenas acciones personales debido al relajamiento de las defensas, hasta el 105-85 final.