Ian Mackay ya es historia en el RC Deportivo. Ha finalizado su segunda etapa en el club tras dos temporadas y media sin conseguir el objetivo que se propuso cuando vino aquí, el retornar a Segunda lo más pronto posible. Aunque quién sabe, lo mismo lo conseguimos esta misma temporada y entonces habría que considerar al portero coruñés como partícipe de dicho ascenso al haber formado parte de la plantilla durante esta temporada. Lo mismo que Rudy Cachicote y Culio volvieron a Riazor a celebrar el ascenso del año 2014 a pesar de haber abandonado la plantilla blanquiazul en el mercado de invierno, pues lo mismo habría que hacer con Ian Mackay si este año acabamos -ojalá- ascendiendo.
Y, en fin, no sé qué piensan la mayoría de los que lean estas líneas, pero una vez más, creo que ha fallado el aspecto humano a la hora de despedir a alguien que es algo más que uno de tantos futbolistas que han llegado estos años al Deportivo. No se trata de privilegiar a alguien que sólo lleva dos años y medio por el mero hecho de ser coruñés. Tampoco se le pide un homenaje como el que se le hizo a Álex Bergantiños en el Teresa Herrera después de tantísimos años en el club. Pero sí me hubiese gustado otra forma de despedir a Mackay. Él vino al Deportivo después de ser proclamado el mejor portero de Segunda el año anterior.
Tenía ofertas más atractivas tanto económica como deportivamente y prefirió volver al Deportivo.
Todos sabemos que hubo otros exjugadores deportivistas a los que se les ofreció fichar por el club y que declinaron hacerlo (cosa totalmente entendible, por supuesto). Pero él no. A él le llegó una oferta del Deportivo y volvió a la que era su casa. Eligió la felicidad y el estar donde él quería estar. No sé, me hubiese gustado que se despidiese de otra manera, y no con la típica rueda de prensa y a mitad de temporada. Se podrá decir que en todas partes pasa lo mismo, como sucedió con Casillas en el Real Madrid, o con el mismo Benzema, que le vinieron los petrodólares a buscar y ni se despidió. Pero a mí lo que pase en otros sitios me da igual . A mí me importa lo que pase en el Deportivo.
Otras personas justifican la baja de Mackay en el aspecto deportivo. Que si ya no es el mismo, que si ahora genera inseguridad, y no sé cuántas cosas más. Y, sobre todo, aún hay gente que le recuerda el horrible partido de Castellón de la temporada pasada.
También hay gente que defiende la jugada de dar la baja a un portero senior, dar de alta a Eric Puerto, que es sub-23, (al cual le deseamos toda la suerte del mundo, por descontado), y así ganamos no una sino dos posibilidades de fichajes senior. Hasta ahí todo normal. Respecto al rendimiento deportivo, pues vamos a ver, no seré yo el que defienda su actuación en aquel partido, pero mal vamos si acaba pesando más ese partido que toda su trayectoria en estos dos años y medio. Quien sabe, igual si no hubiera sido por sus actuaciones anteriores ni habríamos llegado a clasificarnos para aquel play off.
Y en cuanto a las bajas y altas senior y sub-23, pues a principios de temporada la dirección deportiva decidió que la portería estuviese ocupada con dos fichas senior y dotando al puesto de mayor competencia, que siempre está muy bien. Que a nadie se le olvide que estos dos años anteriores todos temblábamos cada vez que faltaba Mackay porque sus respectivos sustitutos no eran de su mismo nivel (aunque tampoco lo hicieron mal, todo hay que decirlo).
¿Que ahora la dirección deportiva ha cambiado de opinión y quiere un sub-23 en la portería? Pues nada, será eso, un cambio de opinión, que parece que está muy de moda últimamente. Habrá que creérselo. O no.
Gracias por todo, Ian Mackay. Si este año subimos también será mérito tuyo. Que no te quepa duda.