Tres nombres propios, tres campeones, tres disciplinas deportivas, han sido este fin de semana un ejemplo de lo grande que es el deporte de esta ciudad. Lucas Pérez, Jacobo Copa y Ferenc Szabó han recibido el reconocimiento merecido en homenajes hechos a su medida. Una exhibición del campeón del mundo junior de patinaje artístico aprovechando el Campeonato de España que se disputa en el Palacio de los Deportes de Riazor, un regalo para los sentidos. Estaba previsto un homenaje a Jacobo Copa tras proclamarse por segundo año consecutivo campeón de Europa con la selección española de hockey patines para cerrar el torneo OK Liga de plata de las fiestas del Rosario y por fin, un Trofeo de Halterofilia que a partir de esta primera edición, llevará el nombre de Ferenc Szabó.

Son tres deportistas que llevan el nombre de nuestra ciudad a lo más alto y por eso es digno que A Coruña les devuelva aunque sea una mínima parte del reconocimiento. De los tres, permitidme que le preste más letras al entrenador de halterofilia. Y es que confieso debilidad por Ferenc. Fue la primera persona con la que contacté el día en el que me nombraron concejala. Me dijeron que estaba muy preocupado, pedí su teléfono y le llamé. A partir de ese momento la conexión fue absoluta. Descubrí a un hombre entregado, implicado, con pasión por su deporte, por los deportistas. Descubrí también el cariño que se le tiene en su deporte en toda España, “lo quiere todo el mundo en nuestro país”, me comentaba el presidente de la Federación Española durante la competición.

Gracias a la pandemia, y digo gracias porque otras ciudades no se arriesgaron a acoger campeonatos nacionales que A Coruña sí aceptó, vivimos en estos últimos dos años grandes competiciones que han demostrado que la nuestra es una ciudad que siente y vive la halterofilia con respeto. Por eso, ha sido un orgullo inmenso y una enorme satisfacción acogerlos aquí de la mano del Club Halterofilia Coruña.

A Coruña es sinónimo de deporte. Y lo es porque los valores que transmite son los que queremos para nuestra ciudad: esfuerzo, superación, perseverancia, igualdad, respeto, deportividad, solidaridad y compañerismo, éxito personal y colectivo, entre otros muchos.Y siendo sinónimo de deporte, A Coruña vive un especial idilio con la halterofilia. Un idilio que tiene un máximo responsable: Ferenc Szabó. Embajador de esos valores, posee la fórmula mágica que le permite reclutar a los mejores desde muy pequeños y curtirlos para convertirlos en campeones. Es como un padre para ellos, los educa en el deporte y en la vida. Gracias a él tenemos a grandes deportistas que se han convertido también en grandes personas.

La Casa del Agua es la Casa de los Campeones y Ferenc es el alma que hace que todos los que aquí llegan se sientan como en casa. A Coruña le debe mucho a este gran hombre, justo es que nazca el Trofeo Internacional Ferenc Szabó. Por muchos años