Después de ser titular en las tres primeras jornadas de Liga, desapareció de los onces iniciales del Bergantiños en los siguientes diez partidos. En cambio, José Currás ha vuelto con más fuerza y está en uno de sus mejores momentos de la temporada. El lateral de 22 años se ha convertido en un fijo para Jorge Cuesta en las últimas semanas. Ante el Guijuelo disputó los 90 minutos.
¿Ha dolido especialmente la derrota en el primer partido de 2025 contra el Guijuelo?
A nadie le gusta perder y menos en casa, delante de nuestra afición. Pero tampoco tenemos mucho tiempo para pensar en ello porque esto no para y el próximo domingo nos enfrentaremos a un rival muy complicado en su campo.
El Guijuelo se adelantó hasta en tres ocasiones. ¿Por qué no llevó el Bergantiños el partido a su terreno?
Nos faltó pausa y calma con el balón porque cada vez que llegábamos a campo contrario ya queríamos buscar situaciones de peligro con centro o tiro. Tampoco estuvimos muy precisos en ciertas acciones del juego.
Quizá cuando mejor estaba el Bergan en la segunda parte, llegó el penalti del 2-3. ¿Qué le pareció la decisión?
Dentro del campo no lo vi muy bien porque me pilló de espalda. Es una decisión complicado pero no pitaría penalti porque es un forcejeo en el que los dos jugadores se agarran. Pudo pitar en contra como a favor pero, desde mi punto de vista, no es penalti.
¿Qué le faltó al Bergantiños?
No destacaría ningún aspecto en el que fuesen mejores que nosotros pero sí se aprovecharon de nuestros errores. Salieron a la contra cada vez que pudieron y nosotros estábamos muy partidos y muy largos. Nos generaron peligro a través de nuestros errores y de nuestras imprecisiones.
¿Está Currás en su mejor momento de la temporada?
No creo que esté en mi mejor momento. Me estoy notando con mucha confianza, pero soy consciente de que todavía puedo dar mucho más.
¿En qué ha cambiado desde el inicio de la Liga para haberse ganado la confianza del míster en las últimas semanas?
Más que cambiar ha sido ser constante. Es darlo todo cuando juegas de titular para seguir estando en el once, pero también cuando eres suplente y entras dándolo todo para demostrarle al entrenador que quieres ser titular y, a partir de ahí, ir corrigiendo los fallos que cometes en un partido.
Contra el Guijuelo, disputó la primera parte en posición de extremo. ¿Cómo se le dio jugar en ese puesto?
La verdad es que no me sentí demasiado cómodo esa parte en la que jugué de extremo. Prefiero seguir siendo lateral.
¿Lo fueron trabajando por la semana o le sorprendió la decisión del míster?
Lo trabajamos un poco por la semana pero, independientemente de eso, me sorprendió la decisión final del míster de situarme ahí de inicio.
En verano se rumoreó con su salida del Bergan pero decidió quedarse. ¿Por qué?
Sinceramente, fue una situación bastante complicada para mí pero, cuando en verano se rumoreó que podría venir Jorge Cuesta al Bergantiños, me llevé una alegría porque nos conocíamos de estar en el Celta juntos. Venía con confianza tras haber tenido minutos en el Caudal. Sabía de lo que podría ser capaz de dar al equipo y, al final, aquí estoy.
Esta es su primera temporada en Segunda Federación. ¿Qué le está llamando la atención de la categoría?
Me llamó la atención el nivel de jugadores que tienen algunos de los equipos que pelean el playoff y el ascenso directo. Y también como en una o dos jornadas puede cambiar prácticamente toda la clasificación.
Comparte posición con Bastos. ¿Cómo es su relación y qué ha podido aprender de él?
Nuestra relación es muy buena. Soy un jugador al que le gusta mucho el buen rollo y el buen ambiente y, ante todo, hay que ser persona y hay que respetarse y llevarse bien con todo el mundo. A nivel futbolístico, me ha sorprendido mucho su nivel asociativo por dentro.
¿Y del míster? ¿Qué le está aportando Jorge Cuesta?
Jorge Cuesta es una persona que ya me conoce y lo que me aporta, sobre todo, es autoexigirme. Y también la confianza que me da.
En el otro lateral, Tijan es un fijo. ¿Le está sorprendiendo su rendimiento?
Me ha sorprendido mucho porque es un portento físico que no para de subir y bajar la banda todo el rato.
El Bergantiños es undécimo, está a dos puntos del playout y a tres del playoff. ¿Para dónde mira Currás?
Miro para abajo porque el objetivo que nos ha marcado el club es conseguir la permanencia en la categoría. Una vez que esté hecho, ya podremos mirar para arriba y hablar de intentar jugar el playoff.
¿Qué es lo que más le está gustando del equipo?
El buen ambiente que hay en el vestuario entre todos, independientemente de los que jueguen más o menos. Estamos todos muy unidos y eso, a la larga, nos va a dar mucho.
A nivel de juego, ¿le está sorprendiendo el Bergan?
Sí, sin duda. Teniendo en cuenta que somos un equipo recién ascendido, creo que estamos dando un buen nivel en cuanto a juego.
¿Qué le falta al Bergantiños para ser más regular, sobre todo, en casa?
Es complicado porque, al final, hemos salido con buenas sensaciones de la mayor parte de los partidos. Si tuviese que decir algo, sería ser más determinantes y agresivos en área rival y tratar de corregir esos errores individuales que muchas veces nos cuestan goles.
¿Qué objetivos se marca en lo que resta de temporada?
Jugar el mayor número de minutos posibles, sumar más asistencias, seguir ayudando al equipo en todo lo que pueda y a ver si cae algún que otro gol.
¿Y el equipo? ¿Para qué cree que está capacitado?
Considero que tenemos equipo de sobra para cumplir el objetivo que nos ha marcado el club, que es la permanencia, para estar tranquilos en la clasificación y poder completar una temporada bonita.
¿Cómo llega un coruñés del Montañeros al Celta antes que al Dépor?
No estaba enterado de nada porque, con esa edad, simplemente jugaba al fútbol y no pensaba que ningún club así podría llegar a llamarme. Cuando se dio la oportunidad, fui a probar a A Madroa e intenté hacerlo lo mejor posible.
Fueron cuatro años allí.
Me sirvió de mucho porque con todos los entrenadores con los que estuve aprendí cosas distintas. Vi cómo funciona un club profesional por dentro y aprendí de la profesionalidad de algunos jugadores.
La opción de jugar en la cantera del Deportivo le llegó como sénior con el Fabril. ¿Cómo fue su paso por Abegondo?
Mi etapa en Abegondo fue complicada porque no tuve minutos ni confianza en mí mismo pero, a nivel personal, me fue bien porque conocí a muy buenas personas que, a día de hoy, son mis amigos.
En un Dépor-Celta, ¿con quién va Currás?
Se hace raro porque soy de Cerceda, pero yo voy con el Celta.