La primera mitad contra el Costa Adeje evidenció que el Deportivo de Fran Alonso comenzaba a mostrar buenas hechuras, pero le faltaba lo más importante, el acierto y la capacidad para sufrir. Ambos detalles llegaron contra el Levante, en un duelo clave que definió una magnífica jugada entre Ainhoa Marín y Millene. En el fútbol buena parte del éxito es cuestión de calidad en el último tercio y las atacantes blanquiazules demostraron tener más que el Levante.

1. Triunfo con peores datos que el rival

El Dépor sabe esta misma temporada lo que es presentar una mejor tarjeta estadística que el rival y no sacar el resultado deseado, por lo que ya le tocaba experimentar la sensación contraria. La posesión de balón fue para un Levante (64%) que también chutó más (doce frente a nueve) y dirigió el balón una vez más entre los tres palos, pero las atacantes granotas no tuvieron acierto.

2. Inês Pereira no baja del notable en Riazor

Quizá no fue un día en el que debió hacer paradas espectaculares, pero Inês Pereira siempre aporta al equipo. El Levante le probó con un par de intentos cercanos que iban al cuerpo, pero que había que sacar venciéndose bien abajo, y con un chut lejano ante el que mostró una gran seguridad.

3. Acierto táctico de Fran Alonso

Era difícil apostar en la previa del partido por la presencia de Lucía Martínez en la línea de tres centrales que está utilizando Fran Alonso desde su llegada. Y lo cierto es que le dio muy buen resultado y parece probable que repita esta decisión en próximos compromisos. Cuando el Dépor tuvo el balón aprovechó su visión de juego para sacar el balón con criterio, sin cometer ningún error, y también se animó a romper líneas con alguna conducción que puso en ventaja a la atacante de banda derecha. Más allá de eso, cuando el Dépor debió sufrir en el tramo final estuvo atenta a su marca y no dio facilidades a las granotas ni en pelota parada ni en acciones de juego lanzado.

4. Un gol que invita al optimismo

Ganar era lo más importante, pues servía para dejar a tres puntos al Levante, situación que habría sido la opuesta en caso de derrota, pero también invita al optimismo quien lo protagonizó. Millene se sitúa con tres goles en Liga, deja atrás las malas sensaciones de sus fallos ante el Costa Adeje y gana confianza de cara a una segunda parte del curso que fue su punto fuerte en la temporada del ascenso.